El conocimiento de solicitud de medidas de coerción contra Gabriel Domínguez, Gaby, el comunicador señalado de violar sexualmente a una joven de 19 años en Sosúa, Puerto Plata, fue aplazado para el próximo viernes 1 de septiembre.
El juez Romaldi Marcelino acogió la petición de los abogados de la defensa, quienes pidieron el aplazamiento de la audiencia para conocer el expediente.
El Ministerio Público ha calificado el hecho de manera provisional de violación a los artículos 330 y 333, letra F, y 333-2, del Código Penal Dominicano, modificada por la Ley 24-97, que tipifican y sancionan la agresión sexual.
Carmen Daynisa Rosario, fiscalizadora adscrita a la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la Fiscalía de la citada provincia, establece en la solicitud de medida de coerción que dos víctimas, cuyos nombres se omiten para proteger su identidad, contactaron al supuesto agresor tras una publicación en las redes sociales de Instagram y Facebook, donde se ofertaba un empleo de secretaria en un canal de TV.
«Indica que cuando una de las jóvenes se presentó a la cita laboral en el canal de TV, este aprovechó para quedarse a solas en ese momento con la víctima, quien se puso muy nerviosa y temerosa por el accionar del imputado al encerrarla en la oficina junto con él y hacerle una serie de preguntas, además de que la amenazó, advirtiéndole “que ella era la que sabía si iban a salir los dos de ese lugar o si iba a salir él solo”, por lo que la joven se vio en la necesidad de cumplir todo los caprichos del imputado con el fin de salvaguardar su vida», detalla una nota del órgano acusador.
El proceso judicial contra el comunicador se abrió luego de que una joven dio a conocer la denunciara a través de sus redes sociales contra el supuesto agresor, que ha consternado a los residentes de dicha localidad.
Aunque Gaby fue arrestado mediante la orden número 609 -01 – 2023 TAUT – 01747, todavía quedan publicadas las desgarradoras palabras de la joven sobre el presunto incidente, sobre el cual no precisó cuándo y bajo cuáles circunstancias ocurrió.
A continuación el relato íntegro de Santos:
«Cada vez que nos pasa una situación difícil, las personas nos dicen todo; pasa por algo, pero estoy preguntándome ¿por qué me pasó esto? Todavía no encuentro las palabras para explicar lo que siento, pero si de algo estoy segura es de que yo no lo merecía.
Me ha tomado años participando en la ONU, defendiendo los derechos humanos, los derechos de la mujer, me tomaba días, horas y meses para defender un país, una postura, para defender el acoso y el abuso, me he preparado para defender todo, pero nunca me preparé para defenderme a mi misma de un maniático.
No tengo mucho que decirles en este momento, pero sí algo sé: es que alzaré mi voz, por esas chicas que no tuvieron. Tú me rompiste, pero te juro que sanaré y haré mi mayor esfuerzo por no permitir que le hagas sentir esto a una más. Tienes hijas y de todo corazón deseo que tus hijas nunca sientan lo que estoy sintiendo en este momento.
¿Saben que es lo que más me duele? Que no pude defenderme, que no pude ni siquiera escupirte y decirte el asco que sentía. Dios te perdone porque yo nunca lo haré. Eres un abusador, un acosador, violador, eres la peor rata que podría tener nuestra sociedad. Te diré la verdad, por si algún día ves esto, yo quise estar fuerte pero cuando te vi me rompí, sentí deseo de vomitar.
Sin embargo, mañana, cuando vuelva a verte, te juro que voy a tener fuerza no solo por mí sino por todas, te juro que libre o preso, vas a pasar el resto de tu vida siendo el culpable del sufrimiento de una chica de 19 años que lo único que ha querido es crecer, apoyar y progresar. Ahora sé que no sabes lo que es ser fuerte hasta que sientes que serlo es tu última opción».
En caso de comprobarse que Gaby abusó sexualmente de la joven, enfrentaría una pena de entre 10 y 15 años de prisión.