POR TANIA HIDALGO
Se aplazó sin fecha fija la demanda por RD$500 millones presentada contra el cantante Julio Iglesias; el afamado diseñador Oscar de La Renta; el filántropo Theodore W. Kheel y el Grupo Punta Cana.

La jueza de la Quinta Sala Civil y Comercial del Distrito Nacional, Katia Gómez Germán, adoptó la decisión luego de que los abogados de la parte civil constituida, Abel Rodríguez del Orbe y Lincoln Hernández, solicitaran al tribunal un plazo para certificar los documentos que sustentan la acusación, a lo que no se opusieron los abogados de los demandados representados por Luis Rivas, Hipólito Herrera y Ricardo Ramos.

Los abogados de la Oficina Hernández & Hernández dijeron que el Grupo Punta Cana trata ilícitamente de despojarlos de 900,000 metros en la zona de Punta Cana, tras negarse a venderle los terrenos en la suma de US$4 millones que les ofrecieron, porque el valor real es de US$23 millones.

Rodríguez del Orbe y Hernández señalaron que además de tratar de despojarlos de los terrenos adquiridos mediante el pago de honorarios, el Grupo Punta Cana está supuestamente evadiendo al pago de impuestos al fisco a través de «compañías fantasmas que ya fueron disueltas».

Dijeron que el fraude contra el Estado consiste en constituir compañías nuevas para beneficiarse de incentivos a través del Consejo de Fomento Turístico (Confotur). Hernández recordó que actualmente el ex presidente de Chile, Augusto Pinochet Ugarte, su esposa y sus hijos están siendo procesados por la justicia chilena por evasión fiscal.

Refirieron que las compañías inexistentes, o sea, ya disueltas, son Marina Punta Cana, Hacienda Punta Cana, Punta Cana Golf y Playa, Ganadera Punta Cana y Constructora Punta.

Manifestaron que los demandantes tratan de deslindar terrenos de esas compañías que no existen para que los estos no caigan en la litis que mantienen con la oficina Hernández y Hernández.

Explicaron que con la compañía Punta Cana Beach y Golf, de reciente creación, conformada por Frank Rainieri, su esposa, sus hijas y el Grupo Punta Cana, tomó un préstamo de US$5.2 millones en una entidad bancaria.

Descartaron que la litis judicial que se mantiene contra el cantante español, el modisto De la Renta, el filántropo Kheel y el Grupo Punta Cana perjudique la proyección del país como destino de inversión extranjera.

Dijeron que el Grupo Punta Cana pretende intimidar a la justicia dominicana y que las leyes dominicanas consignan la publicidad de los juicios.

«El mundo debe saber que Julio Iglesias, Oscar de la Renta y el filántropo Theodore Keel, después de contratar abogados dominicanos y pagarles complacidos por su trabajo, pretenden revertir la cesión del inmueble, sólo porque los mismos adquirieron un valor considerable gracias a la cercanía del proyecto Cap Cana», explicaron.