POR LLENNIS JIMÉNEZ G.
La Procuraduría General República sometió, a partir de ayer, a la prueba de antidoping a más de 5,000 funcionarios y empleados del Ministerio Público en todo el país, para asegurarse que su personal no consume droga.

El procurador general Radhamés Jiménez Peña, dijo que los exámenes serán de sorpresa en todas las dependencias y departamentos, y advirtió que el procurador, fiscal o empleado que de positivo en el consumo de droga, será separado de la institución ministerial. Esta es la continuación del proceso de depuración en el poder Judicial, ya que la semana pasada la Suprema Corte de Justicia (SCJ) aplicó la prueba de antidoping para sus más de 6,000 miembros.

El magistrado Jiménez Peña inició la realización del examen en su despacho, siendo el primer funcionario en practicárselo, al término de la rueda de prensa donde anunció el desarrollo del examen.

Las pruebas serán realizadas por médicos del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF). El procurador expresó que procuradores, fiscales, fiscales adjuntos y fiscalizadores deberán hacerse el estudio a nivel nacional, «con el objetivo de descubrir el posible consumo de estupefacientes». Deberán efectuarse el antidoping todos los miembros del Ministerio Público en juzgados de paz, fiscalías, tribunales de mayor jerarquía como procuraduría, Corte de Apelación. Los empleados y fiscales del Departamento de Prevención de la Corrupción Administrativa (DPCA), la Dirección General de Prisiones, las escuelas del Ministerio Público y Nacional Penitenciaria.