El Presidente del Consejo Nacional de Fronteras, embajador Radhamés Batista apoyó hoy las medidas de la Dirección General de Migración en la frontera dominicana que busca evitar la migración de haitianos ilegales, y pidió a su incumbete, José Ricardo Taveras, la ampliación de esas disposiciones en toda la línea divisoria de ambos países.  

Lo grave de todo esto, dijo Batista, es que además «observamos unos personajes que tradicionalmente viven criticando las debilidades institucionales del país y sin embargo son ahora los peores críticos de las medidas de control de migración con lo que dejan ver su doble moral al respecto».

El diplomático manifestó que esta acción debe ser aplicada junto a un fortalecimiento de la presencia militar en los puntos de paso que normalmente usan los ilegales y que no son regulados por migración.  

“Lo que observamos en esta medida es una reafirmación de la voluntad soberana respecto a los controles migratorios, a nuestra soberanía  territorial ya que la institucionalidad fronteriza hay que  rescatarla del punto bajo en que se encuentra”, agregó el embajador Batista.  

Añadió que “han llegado hasta el colmo, que un sacerdote tiene en su parroquia una oficina paralela donde data de carnet y permisos de estadía a los ilegales del vecino país como si él fuera una institución oficial”.

Dijo que «Creemos que la ciudadanía dominicana debe levantar su voz de apoyo a la Dirección de Migración, ya que, con esto, no se busca detener el paso de nadie, pura y simplemente, sino, establecer en toda la medida de lo posible el uso de los documentos reglamentarios, como se estila en todos los países del mundo». 

Indicó, además, que: «Estamos seguros de que si el gobierno haitiano se preocupara en dotar de pasaporte a sus nacionales que están ahora mismo en Dajabón, migración podría concederles la gracia de exonerarles la visa por  primera vez, como una medida de flexibilidad y de apoyo al esfuerzo que en ese sentido hagan las autoridades de ese país».  

Investiga caso MT. Por otro lado Batista manifestó que el Consejo Nacional de Fronteras está investigando la manera en que entraron los haitianos que reclaman derechos laborales en el Ministerio de Trabajo, puesto que si es verdad  que fueron traídos por e empresario que mencionan, el mismo se hace pasible ser sometido a la justicia por el delito de trata de personas.