Profesores de Historia, Antropología, Letras,  Artes y Publicidad de la Universidad Autónoma de Santo Domingo 

(UASD), valoraron de positiva la campaña promocional  que realizan varias empresas privadas  en las resaltan los símbolos patrios y  las figuras  de destacadas personalidades dominicanas.

Esos catedráticos coincidieron en destacar que en ese tipo de campaña deberían involucrarse otras empresas, instituciones públicas y la sociedad civil, como forma de contribuir a revalorizar nuestros valores patrios.

La empresa Verizon fue la pionera en ese tipo de promoción publicitaria, a través del spot «Yo soy Dominicano», seguido de la Cervecería Nacional Dominicana.

Agustín Cortes, profesor de Artes, Publicidad y Comunicación, Héctor Luis Martínez, y Ramón Rodríguez, Historia, Bernardo Santana, catedrático de Antropología y Nan Chevalier, de la Facultad de Letras, de la universidad estatal, respectivamente, emitieron sus opiniones favorables a la campaña de publicidad  emprendidas por las empresas Verizon, la Cervecería Nacional Dominicana y otras empresas, en la cual resaltan los símbolos patrios, a la vez que incorporan a figuras nacionales.

A favor de la campaña publicitaria, en la que la empresa Verizon fue pionera, y que ha sido seguida por la Cervecería Nacional Dominicana, se han expresados otros profesionales de diversas áreas, entre ellos publicistas, sociólogos, estudiantes de diversas universidades, dirigentes comerciales  y otras personas, quienes consideran que toda campaña que procure revalorizar nuestros símbolos patrios debe ser apoyada por toda la sociedad dominicana.

El creativo en arte publicitario René Fiallo considera que ese tipo de campaña, siempre que sea con el interés sincero de resaltar nuestros valores, merece el reconocimiento de todos los dominicanos.

Nan Chevalier, profesor de Letras, aunque respalda ese tipo de recurso publicitario, plantea que esas empresas sean cuidadosas al explotar esos recursos de manera que resulten realmente de utilidad a los mejores intereses de la nación.

«Aunque no soy experto en publicidad, pero considero delicado que se utilicen los símbolos patrios de una nación en asuntos de publicidad, a menos que ese tipo de campaña resulte de utilidad a los mejores intereses de la nación».

«No es que por sí mismo esté mal una promoción en ese sentido, sino que debe estar orientada a los mejores objetivos del país», añadió.

De su lado, Bernardo Santana, considera de muy positiva ese recurso de campaña, ya que contribuye a la valorización y a promover la conciencia histórica del pueblo dominicano, los valores patrios, los lugares de atracción turística, la naturaleza y la biodiversidad presente en el entorno.

«Me parece que es demostración de que las empresas nacionales están tomando conciencia de su papel social frente a la comunidad a la que sirven, venden sus productos, y al mismo tiempo contribuyen a mejorar la educación y la cultura de la gene», sostuvo.

Consideró que las demás empresas deberían comprometerse también con el país.

«También ese tipo de campaña no debe quedarse solamente en publicidad, sino en ayudas afectivas a las organizaciones y a las escuelas que producen material educativo», subrayó.

Dijo que aunque esas empresas procuran promover sus productos, si lo hacen con el trasfondo de nuestros valores de la dominicanidad, hay que aplaudirlas.

«Además, es una forma de refugiarse  en lo nuestro», expresó.

Héctor Luis Martínez, profesor de Historia de la UASD, tras resaltar la importancia de dicha campaña, considera que debe ser imitada por otras empresas e instituciones públicas, como forma de resaltar los valores de nuestra nacionalidad.

Martínez planteó que «esos valores patrios deben además ser promovidos, a través de conferencias, paneles realizados en los diferentes sectores de la sociedad, principalmente de los barrios, haciendo señalamientos claros de cómo debe ser  el interés que se desarrolle, en buscar la identidad, en valorizar a Duarte, la Bandera, el Himno Nacional y todo lo que signifique la nación dominicana».

«Pero también en esa parte deberíamos pensar ir a la zona fronteriza y vender los productos de esas compañías a través de estos trabajos, proyectando lo que es la realidad  de esa zona, lo que es la patria allí, no solamente presentar los monumentos, sino a la sociedad dominicana en todos sus aspectos», añadió.

 Sostuvo que en ocasiones determinadas empresas «no son originales o auténticas  en ese tipo de campaña, porque lo que más les interesas es obtener aceptación del público que recibe los servicios de los productos que venden».

«Cada quien presenta sus características y la presentan como que son originales», agregó.

«Lo que nosotros pensamos es que deben ser originales en la promoción del sentido patrio, de la nacionalidad, de la dominicanidad».

Favoreció que se ponga a participar en este tipo de promoción a representantes de los diversos sectores del país, a través de conferencias y otras campañas educativas, en las cuales se les explique a los jóvenes que deben pensar como lo hizo Juan Pablo Duarte, Gregorio Luperón y otros grandes dominicanos del siglo XX, en realzar lo que son nuestros valores patrios».

El licenciado Agustín Cortés, catedrático de Artes y Publicidad de la UASD, entiende que los recursos publicitarios que se está utilizando son muy favorables, porque independientemente de la intención que tenga una compañía o un grupo de empresas determinadas de vender sus productos y servicios, están utilizando símbolos importantes para la juventud, para dar a conocer las cualidades fundamentales de la República Dominicana.

Recordó que Codetel lanzó por primera vez esa campaña, bajo el slogan Dominicano, Pa»Lante, con lo cual hizo acopio a una expresión que políticos en una ocasión en los años 60 y 70, «por lo que la publicidad es eso, se renueva constantemente y hay cosas que están en el mercado publicitario, la moda o la vida normal de cada ciudadano y en un momento pasan de moda y en un momento es retomado en el  momento preciso.

«Se trata de campaña muy favorable, porque nos hacen ver en el mundo lo significativo que es tener una vida trascendente dentro de los cánones legales y morales adecuados», expresó.