Berlín. El Gobierno alemán aprobó hoy un proyecto de ley para introducir en el registro de nacimiento un tercer sexo, además del masculino y el femenino, bajo la denominación de “otro” o “diverso».
La medida sigue a la sentencia del Tribunal Constitucional de 2017 por la que se instaba a la Administración a introducir una tercera opción en el registro de nacimiento y permitir con ello una inscripción positiva a aquellas personas que no pertenecen al sexo masculino ni al femenino.
Tras la aprobación se espera que el proyecto de ley entre rápidamente en el trámite parlamentario, indicó el portavoz del Gobierno, Stefen Seibert, de manera que para principios de 2019 podría entrar en vigor.
“Es hora de que se modernice una vez la legislación vigente”, apuntó la ministra de Justicia, la socialdemócrata Katarina Barley, a cuyo departamento correspondió elaborar el correspondiente proyecto.
La mencionada sentencia del TC argumentaba que, de acuerdo al derecho constitucional a la protección de la personalidad, las personas que no son ni hombres ni mujeres tienen derecho a inscribir su identidad de género de forma “positiva” en el registro de nacimiento.
El fallo supuso un paso más allá en el reconocimiento de los derechos de los intersexuales en Alemania, después de que en 2013 se aprobara una reforma legal que permitía a los padres de recién nacidos que no tuviesen que registrar obligatoriamente a sus hijos como hombres o mujeres en el registro civil si no se podía determinar con claridad su género.
La reforma de 2013, que seguía la recomendación del Comité Ético Alemán, establecía que “si un bebé no puede ser identificado como perteneciente al género masculino o femenino, se dejará sin rellenar el apartado correspondiente en el registro de nacimiento».
El objetivo de esa ley era evitar presiones sobre los padres y que no tuvieran que determinar inmediatamente después del nacimiento del bebé el sexo de éste o tener que adoptar decisiones precipitadas. Se estima que en Alemania hay aproximadamente 80.000 intersexuales, algo menos del uno por ciento de la población.