La ciudad de Buenos Aires, que desde septiembre tenía una calificación de mayor solvencia que la del gobierno nacional, se ve expuesta a la devaluación del peso porque casi toda su deuda tiene denominación en dólares.
La capital argentina tiene el 98% de su deuda denominada en dólares o en valores vinculados al dólar, en comparación con el 57% de Córdoba, la provincia que tiene el segundo mayor porcentaje de deuda en dólares en relación con el total, según Moody’s Investors Service. La caída de 15% del peso de la semana hasta el 24 de enero hizo que los rendimientos de los bonos en dólares a 2015 de la ciudad treparan a 18,2%, la mayor cantidad desde junio de 2012 en relación con los pagarés de Chubut a 2020.
De las provincias que tienen bonos internacionales en dólares, Chubut es la que menor exposición tiene a deuda en moneda extranjera. Los gobiernos locales aumentaron su dependencia de los bonos vinculados al dólar, que pagan a los inversores en pesos a la paridad oficial, luego de que los costos crediticios internacionales subieran a raíz de la nacionalización de YPF en 2012 y de que la presidenta, Cristina Fernández, endureciera los controles cambiarios.
La ciudad de Buenos Aires, que tiene US$760 millones de pagarés vinculados al dólar, sufrió el 10 de febrero una reducción de su nota a CCC+ por parte de Standard Poor’s.