JOSÉ M. RODRÍGUEZ HERRERA
CHAPI (Ruperto). Compositor español, nació en Villena y murió en Madrid (1851-1909). Pasó una juventud llena de privaciones y fatigas para ganarse el sustento, mientras estudiaba. Logró por oposición la plaza de músico mayor de un regimiento, y en los conciertos que daba su banda, en el Salón del Prado, estrenó la famosa Fantasía Morisca, luego y también por oposición pasó a Roma y París, de donde envió interesantes partituras.

Pero sus grandes éxitos comenzaron con las zarzuelas La tempestad (1882) y La Bruja (1887). Constituyó la Sociedad de Autores, Compositores y Editores de Música, que en 1901 se transformó en las más amplia Sociedad de Autores. En 1897 estrenó La Revoltosa; en 1898, Curro Vargas, y en 1909 logró el éxito más grande de su vida con su ópera Margarita la Tornera, cuyo estreno precedió un mes a su muerte. Escribió otras muchas zarzuelas, algunas populares como el Rey que rabió, El tambor de granaderos y El puñao de rosas. Todas sus producciones están impregnadas de hondo españolismo y gran sabor popular, y se caracterizan por lo suelto y jugoso de la composición.

CURIE (María). Investigadora francesa que usó el apellido de su esposo Pedro Curie, en vez del suyo de Sklodowska (1867-1934).

Colaboró y prosiguió con notables resultados las investigaciones de su marido, y poco después del fallecimiento de éste fue nombrada para sustituirle en la cátedra de física general en la Sorbona. Junto con su esposo, Pedro Curie y Becquerel, obtuvo el premio Nóbel de Física en 1903, y sola, en 1911, el de Química. En 1919 fue honoraria de Radiología en Varsovia. En 1924, el Parlamento francés le señaló una renta anual de 40.000 francos.

CURROS ENRIQUEZ (Manuel). Poeta y periodista español, nació en Calanova (Orense) y murió en La Habana (1851-1908). Dominó la técnica y recursos del periodismo, y sus fondos, atrevidos y llenos de lógica, sus eruditas críticas literarias y la amena relación de sucesos, que sabía matizar de vida y sentimiento, le dieron gran prestigio.

Es, sin embargo, más conocido como poeta, y sobre todo como poeta gallego. A él se debe el renacimiento literario de tan hermosa lengua y es considerado por sus paisanos como el primer poeta de la región. Entre sus poesías son famosas Aires, d’a miña terra  y Avirxen d’o Cristal. También escribió O divino sainete.