Abú-l ‘Ala’ al-Ma’arrí (Ma’arrat al-Nu’man. 973-1057). Poeta y prosista sirio cuya obra, clave dentro de la literatura árabe, exalta la razón humana, frente a la hipocresía social y religiosa, la injusticia y vanidad de los poderosos.

Ciego desde los cuatro años, estudió en las ciudades de Basora y Bagdad. De regreso a su aldea natal, decepcionado por la vida en la capital califal, llevó hasta su muerte una existencia austera y solitaria, dedicada por completo a la escritura, el estudio y la reflexión.

Su imponente erudición y su memoria prodigiosa, le valieron la administración de sus contemporáneos y dieron pie a numerosas anécdotas.

Su poesía, preciosista y metafórica, en la que predomina el género laudatorio, de lo cual es un buen ejemplo La Chispa del eslabón, es de gran complejidad formal, con juegos retóricos y rítmicos muy sofisticados.

 Su piezas más célebre, La epístola del perdón, verdadera obra maestra de la prosa árabe, en la cual se narra, con buenas dosis de humor desengañado, un viaje imaginario al más allá, inspiró dos siglos más tarde a Dante para la creación de la Divina Comedia.

Su obra, tanto en verso como en prosa, destila un amargo pesimismo. Marcel Achard (Sainte Foy-les-Lyon, 1599-París, 1974). Comediógrafo francés.

 En la década de 1920 consiguió popularidad en París gracias a su eficiente ejercicio del teatro de bulevar y de la comedia ligera.

 Su gran poder de observación le permitió combinar en sus obras elementos poéticos, humorísticos y fantásticos, con un estilo acentuado en la gracia y el sentimentalismo que, por momentos, recuerda a la comedia del arte.