Ver a España y sus jugadores con ese orgullo de brindar su mejor juego por su país nos pone a pensar en la formación integral de sus atletas seleccionados para representarlos en este Mundial China 2019.
Marc Gasol después de una temporada agotadora en la NBA y ganar el campeonato va con todos sus bríos y se pone la franela española logrando conseguir la corona del gran mundial de China.
Los españoles y argentinos equipos que llegaron a la final envían un gran mensaje. En medio de millones, fama, se mantiene el orgullo patrio y por eso ambas escuadras se fueron de China con el respeto de todos.
En esa gran actuación hay un trabajo detrás de esos dos equipos. Una labor titánica de compenetrarlos, pero la educación y la formación de sus jugadores muchos de ellos NBA les permite desarrollar en una cancha su vergüenza deportiva y su amor por el pais donde nacieron.
Ver a un Scola con 39 años jugando 30 minutos y encestando detrás del arco en momentos apremiantes del juego te dice que su amor por Argentina es más fuerte que un calambre o el simple agotamiento de miles de minutos en esas piernas.
Sin dudas que Ricky Rubio el hombre de las charlas motivacionales en las redes fue quien terminó el torneo vestido de gala y se llevó todos los honores del evento que los chinos montaron con saco y corbata.
Sergio la famosa oveja se comportó como un toro llevando a ese equipo a la final derribando todos los pronósticos con un Scola gigante, un Campazzo inmenso y un Deck muy depurado.
Scarioli técnico italiano hace tiempo que prepara fabada, paella y bebe sangrías. Cuanta cautela, que bien movió su plantilla y nunca perdió la calma, el tipo es un profesional con alto nivel.
Finalmente China 2019 nos deja buen sabor de un platillo digno para los más comensales que digerimos el baloncesto como el plato más agradable entre los deportes.
¡Muy bien!.