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Por MOJAMED DARAGME
RAMALA, Cisjordania (AP) _ El líder palestino Yaser Arafat será sepultado en sus oficinas en Cisjordania en un ataúd de piedra y no en uno de madera, para poder permitir que se le pueda enterrar otra vez posteriormente en Jerusalén, indicaron el jueves quienes fueron sus asesores principales.
Arafat deberá ser sepultado el sábado en el complejo de edificios de Ramalá, conocido como Mukata, donde fue confinado por las fuerzas israelíes durante casi tres años.
Durante la noche, algunas excavadoras estuvieron abriendo un terreno ubicado junto al estacionamiento de la Mukata, y fue cavada una tumba, señaló Ajmed Gneim, señaló uno de los principales funcionarios del movimiento Fatá, que era encabezado por Arafat.
El área se encontraba repleta con barriles rellenos de cemento que fueron colocados en el lugar hace dos años, bajo órdenes de Arafat, para frenar un posible avance de los tanques israelíes. Las fuerzas israelíes han bombardeado continuamente la Mukata y han destruido grandes partes del complejo desde que dio comienzo una ofensiva militar a gran escala en el 2002.
Azam al-Ajmed, otro funcionario del movimiento Fatá, señaló que Arafat será sepultado en un catafalco de piedra para que pueda ser desenterrado y sepultado de nuevo en los terrenos de la mezquita Al Aksa en Jerusalén, el tercer sitio más sagrado del Islam.
Israel descartó que se le sepulte en Jerusalén, al temer que podría socavar su soberanía sobre toda la ciudad. Los palestinos desean establecer su capital en el sector oriental de Israel, conquistado por Israel en la Guerra de los Seis Días de 1967.
En un acuerdo, los palestinos acordaron que Arafat fuera sepultado en la Muqata, pero indicaron que ese complejo sería su sitio temporal de sepultura.
«Su última morada será en la Mezquita Al Aqsa. Uno de estos días, tendremos un estado palestino, y el presidente Arafat será llevado a descansar (en Jerusalén)»», añadió el ministro de gabinete Saib Erekat.
Mientras en Ramala, Cisjordania, Centenares de personas invadieron las calles de Ramala el jueves de madrugada con banderas palestinas y fotografías de Yasser Arafat, horas después de que se hiciera pública la noticia de la muerte del dirigente.
Jóvenes, viejos, niños y mujeres no conseguían retener las lágrimas y se congregaban a las puertas de la Muqata, el cuartel general de Yasser Arafat en Ramala donde pasó sus últimos tres años de vida.
