POR ROSARIO TIFÁ
El segundo día  de DominicanaModa estuvo matizado por diseños cálidos, frescos, muchas veces agresivos y provocadores, otros glamorosos y muy chic.

 Arcadio Díaz mostró su  dominio en el diseño de la chacabana, una prenda destinada a los hombres y que gracias a su ingenio ha venido a refrescar y realzar  la silueta femenina. El diseñador reafirma su criterio de elaborar una prenda para el Caribe,  cómoda,  fresca y suelta. En esta ocasión presenta atrevidas guayaberas con magas de corte  kimono y algunas con lazadas en los puños.

Los colores elegidos para esta muestra fueron desde los suaves hasta los muy  brillantes, pasando por los estampados rabiosamente tropicales. Así se observó una muy femenina colección de vestidos con marcada influencia de su emblemática  chacabana. Las texturas elegidas no pudieron ser más acertadas: estopilla Irlandesa, seda cien por ciento natural  y algodón.

Las noveles Ana Montán y Cenia Paredes,  chavoneras, presentaron en la tarde del miércoles  sus propuestas.  Sexy, provocadora,  chic, pero sobretodo muy newyoquina es el calificativo ideal para una colección de Montán,  que no todo el mundo se atreve a usar, solo aquellas de mentes liberales y decisivas  

De su lado, Cenia Paredes  presenta una moda  sobria, inspirada en trazos definidos y muestra su predilección por  tachones y vuelos. Esta prometedora novel se decantó por los tonos amarillos mostaza, marrones y morado haciendo honor al otoño.

Para los gustos los colores… y las formas
No cabe duda que en  la República Dominicana hay talento y creatividad, pero de manera especial es necesario resaltar a la juventud que es  emprendedora, la que quiere marcar la diferencia. Ayer jueves  el primer desfile del tercer día de DM  contó con la participación de tres noveles diseñadoras dominicanas de la escuela  Chavón.

Laura Guerrero Rosado inició su  desfile  a ritmo de bossa-nova,  mostrando  su colección “El cielo en la tierra”.  de modelos holgados y frescos, en telas suaves de colores tenues como son el crema y azul turquesa, una colección que según la  diseñadora es divertida, extraordinaria e innovadora. Aunque a decir verdad  la realidad es que parecen ser diseñadas para el personal  de un hospital.

Luisa Adolfina Cuevas, por su lado, presentó la  colección “Pitajaya”,  inspirada en los dibujos de sus hijos. La aceptación de sus propuestas para ropa de niñas fue más allá de sus colores vibrantes, divertidos y  cómodos con una pasarela dominada por un grupo de niñas que con coqueta ingenuidad se robó los corazones de todos los presentes.

Mientras que,  Carla Carbonell presentó “Yerbabuena” en la que hizo honor a nuestras hermosas playas,  tradiciones y  aventuras. Es una colección que se puede catalogar como “hippie” pero  muy “chic”, en la que predominaron  trajes de baño  y fiesta.

La pasarela se llenó de sensualidad y femineidad con la presentación de la colección “Total vanidad latina”,  de la marca colombina de ropa interior Leonisa. Diseños contemporáneos en el que hay una amplia gama de opciones para elegir, florales y de animales  en combinación con colores suaves y  brillantes.