Río de Janeiro (EFE).- Argentina y Canadá discutirán desde este lunes en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro la supremacía continental del hockey sobre césped masculino y el único boleto a Pekín 2008 que entrega este torneo en tierras brasileñas.

   «Nosotros tenemos toda la presión, pero hay que sacarla afuera con un juego convincente y trasladarla al rival. La carga propia es la que nos debe potenciar para ganar la medalla de oro», aseguró Sergio Vigil, el entrenador más exitoso de la historia del hockey argentino.

   Vigil asumió en 2005 su cargo como entrenador del equipo masculino dispuesto a intentar repetir el camino que transitó al mando de las ya míticas «Leonas», la selección argentina femenina con la que consiguió ser campeón mundial y doble medallista olímpico.

   Sabe que no le será fácil, aunque destila confianza cuando habla de un equipo, el que aún tiene en etapa de cocción, que llega a Río de Janeiro con las acciones en alza por su reciente triunfo en el Champion Challenge de Bélgica, donde cumplió una gran tarea el histórico goleador Jorge «el mosquito» Lombi.

   Canadá, como siempre en las últimas décadas, será el rival de mayor cuidado de Argentina.    

El historial panamericano del hockey sobre césped masculino registra buena marca.