El primer ministro de Haití, Ariel Henry, le manifestó este viernes a la comunidad internacional que la vecina nación «está lista para el cambio» que esperan desde hace dos siglos.
El funcionario, quien habló durante la 78 Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU), añadió que la inseguridad, patrocinada por bandas armadas, ha provocado ese país quede sumergido en la pobreza, por lo que pidió a los países el apoyo a la Policía Nacional de Haití (PNH).
En ese sentido, Henry aseguró que su gobierno seguirá hablando con todos los políticos y actores de su país, para lograr «una buena salida a la crisis» para el retorno de la normalidad y poder seguir haciendo frente a los desafíos actuales.
Henry resaltó en su discurso la incidencia de las bandas armadas sobre la población haitiana, las cuales controlan las escuelas, hospitales, el comercio, lo que representa una nueva crisis humanitaria, «con desplazados que tratan de escapar».
Además, el primer ministro haitiano habló sobre las amenazas sanitarias, como el cólera, las violaciones a los derechos humanos, lo que implica una inestabilidad para la paz de la vecina nación.
Citó el tráfico de órganos, los secuestros, bloqueos de carreteras, asesinatos y otros crímenes, que han incidido en la contracción de la economía. «La crisis humanitaria se acentúa», dijo.
El funcionario resaltó que casi la mitad de la población haitina vive con casi dos dólares al día. Sin embargo, Henry le dijo a la ONU que su presencia allí no fue «para justificar».