Lo que siempre tuvo claro Arlette Borrelly es que quería ingresar al mundo del entretenimiento y los medios de comunicación; lo que no sabía era por cuál rama inclinarse. Nacida en Mao, Valverde, la locutora, quien probó suerte en el mundo del modelaje en su país, encontró su norte al llegar a la ciudad de Nueva York.
Allí despertó su pasión por la radio y luego de ganar experiencia en los espacios “La Ligadera” y “Juntos pero no revueltos”, la locutora pasó a formar parte del programa a través del cual ha ganado más popularidad y proyección: “La bodega de la mañana”.
Un reto. “Ha sido una experiencia maravillosa. Todos los días es un reto diferente, hay que reinventarse; cada mañana es una responsabilidad diferente, trabajamos en un mercado muy exigente, que también sufre muchos flagelos”, expresó Borrelly, quien inició en los Estados Unidos trabajando como maestra de ceremonias.
Según contó, “La bodega de la mañana”, es uno de los programas más importantes y populares de la ciudad de los rascacielos, al punto de que llega a competir con Univisión.
“Nunca pensé que iba a dedicarme a la radio, yo odiaba mi voz, consideraba que tenía una voz horrible, que parecía un hombre hablando”, resaltó.
Ahora, la radio es lo que más le apasiona hacer, aunque entre sus planes también está incursionar en la televisión, una meta que ya está en proceso.