Los alegatos finales en el juicio contra el expolicía acusado de matar a George Floyd arrancaron este lunes en un juzgado de Mineápolis (Minesota), ciudad en la que el exagente Derek Chauvin presuntamente asfixió con su rodilla al hombre afroamericano hasta su muerte en mayo de 2020.
La Fiscalía y la defensa presentarán por última vez sus versiones sobre lo ocurrido ante un jurado formado por 14 personas, aunque finalmente serán 12 miembros los que deliberarán y dictarán el veredicto final, que podría llegar en horas, días o semanas.
Tras escuchar los argumentos de ambos lados, los miembros del jurado se aislarán y encerrarán en un hotel para repasar todas las pruebas presentadas en el juicio y llegar a una sentencia. El exagente está imputado por los delitos de asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años, y homicidio en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad.
Sin embargo, como no tiene antecedentes penales, solo podría ser condenado a un máximo de 12 años y medio de prisión por los primeros dos cargos y a 4 años de cárcel por el tercero. Chauvin, de 45 años, se ha declarado inocente de todos los cargos.
A lo largo del juicio, que empezó el pasado 29 de marzo, la Fiscalía ha argumentado que Floyd murió por la asfixia provocada por la presión de la rodilla de Chauvin, mientras que la defensa ha argüido que su muerte fue por otros motivos, como enfermedades subyacentes, la presión alta, el consumo de opiáceos y el estrés del momento, entre otros.
En la apertura de los argumentos orales, uno de los fiscales, Jerry W. Blackwell, anunció que su objetivo era demostrar que Chauvin es “de todo menos inocente” y que debe ser condenado por el asesinato el 25 de mayo de 2020 de Floyd, cuya muerte provocó una ola de protestas en todo el país.
Con ese fin, mostró uno de los videos del fallecimiento de Floyd, que fue grabado por un transeúnte. “Pueden creer lo que están viendo sus ojos, esto es homicidio, esto es asesinato”, remarcó Blackwell. Los fiscales llamaron a 38 testigos para que testificaran, incluyendo expertos policiales en el uso de la fuerza que criticaron a Chauvin y sanitarios que explicaron cómo murió Floyd.
La defensa ofreció siete testigos, pero no al propio Chauvin, ya que invocó su derecho de la Quinta Enmienda a no testificar por riesgo de poder incriminarse. La recta final de este juicio llega en un contexto de creciente tensión en el país tras la muerte por disparos de policías del afroamericano Daunte Wright, de 20 años, en Brooklyn Center (Minesota) y de Adam Toledo, de 13 años, en Chicago, en las últimas semanas.