POR DOMINGO ABRÉU COLLADO
Con la habilitación de la Cueva No. 1 del conjunto de Cuevas del Pomier puede decirse que se inició el levantamiento de la segunda capital de la República Dominicana, que es a la vez la Capital Prehistórica de las Antillas. La Cueva No. 1 es ahora la principal muestra espeleológica y rupestre para Santo Domingo, la provincia San Cristóbal y la región sur del país.
En ella puede ahora apreciarse con toda libertad y con la claridad necesaria, el esplendor de las manifestaciones rupestres aborígenes taínas de mayor significación para el Caribe insular. El resto del arte rupestre que albergan las Cuevas del Pomier queda para el seguimiento de las labores de investigación científica. Así como sus cuevas verticales quedan además para la práctica de la espeleología a personas debidamente entrenadas.
Como parte del desarrollo de la habilitación de la Cueva No. 1 se colocarán informaciones en su interior y dos dioramas de tamaño natural representando escenas distintas del uso de las cuevas por nuestros aborígenes.
La habilitación de la Cueva No. 1 y la construcción del edificio que aloja las oficinas y centro de recepción provisional, es el punto de partida para lo que será el proyecto ecoturístico y económico de mayor importancia para la Provincia San Cristóbal, puesto que su desarrollo se encamina hacia la revalorización de la comunidad del Pomier, transformándola en una Comunidad Puerta hacia la Capital Prehistórica de las Antillas.
Esta revalorización implica un cambio físico en el aspecto de la arquitectura de esta comunidad. Pero además implica un cambio mayor en el crecimiento cultural y la calidad de vida de sus pobladores.
La Cueva No. 1 no estará abierta sino hasta que se haya organizado el nuevo sistema de visitación y su personal haya recibido el entrenamiento que demanda ahora esta cueva, la que recibirá además la protección militar de la Policía Ambiental, como la recibe la Cueva de las Maravillas, en San Pedro de Macorís. La apertura al público será avisada oficialmente por la Secretaría de Estado de Medio Ambiente.
El desarrollo del proyecto Capital Prehistórica de las Antillas puede tomarse varios años hasta una primera conclusión, porque en realidad un proyecto de esa envergadura no termina con la construcción de la infraestructura física, aún esté todo construido.
Este proyecto demanda un seguimiento que implica un manejo especial tanto para la población circundante a las cuevas como para los visitantes, cuyo número apunta a ser el más elevado de todos los lugares de visitación turística de Santo Domingo y las demás ciudades dominicanas. Pero además apunta a ser el área protegida más visitada después de la Isla Saona en el Parque Nacional del Este.
Esa proyección (muy general) advierte la necesidad de una preparación muy especial para el manejo de los grupos de visitantes, como advierte también de la necesidad de un manejo del área a la altura de las mejor manejadas del mundo, dada su presentación internacional como una Capital Prehistórica correspondiente a todas las islas del Caribe, una región cuya visitación turística crece a paso muy rápido.
Hechas las modificaciones a la Cueva No. 1, las cuevas No. 4, del Puente y Scarlet, tendrán una habilitación de acercamiento para facilitar el acceso hasta sus respectivas entradas y que los visitantes puedan penetrar a ellas salvando los obstáculos del exterior.
Otras cuevas, como la No. 2, 3, 5, Funeraria, del Símbolo, de los Murciélagos y algunas otras, tendrán trillos de acceso hasta sus entradas para que puedan ser admiradas por los visitantes mediante un fácil acercamiento que permitirá además conocer su entorno boscoso, parte de la oferta de esta reserva.