Arrecian las protestas contra Aristide

Arrecian las protestas contra Aristide

PUERTO PRÍNCIPE (EFE).- Al menos dos personas murieron ayer y varias resultaron heridas en la manifestación contra el Gobierno convocada por los estudiantes haitianos y que pretendía llegar al Palacio Nacional.

Las víctimas mortales son un estudiante no identificado, muerto en Puerto Príncipe, y otra persona de la que tampoco se ha facilitado la identidad y que habría fallecido en el barrio de Carrefour, en el sur de la capital.

Carrefour es una de las zonas incluidas en el recorrido de la manifestación.

La marcha cuenta con la participación y el apoyo de la oposición, y se inició tras los funerales hoy por Maxime Desulmon, estudiante muerto el pasado día 7 en una manifestación contra el régimen del presidente Jean Bertrand Aristide.

Varios manifestantes portaron durante parte de la marcha el ataúd con los restos de Desulmon, mientras la multitud coreaba «Libertad o muerte» y pedía la dimisión de Aristide.

El Palacio Nacional se encuentra fuertemente custodiado por la Policía y en el lugar se han congregado también seguidores de Aristide.

Los incidentes se iniciaron tras el funeral y desde entonces la Policía trató de dispersar violentamente la marcha.

En una de estas ofensivas, los estudiantes, que llevaban todavía el ataúd con los restos de Desulmon, se refugiaron en la facultad de Ciencias Humanas de la universidad estatal, y levantaron barricadas en las calles próximas.

La Policía mantiene su cerco a la facultad, contra la que ha disparado y lanzado gases lacrimógenos.

Algunas fuentes sostienen que las fuerzas del orden intentan recuperar el ataúd, que se encuentra dentro de la facultad.

La Policía ha detenido, al parecer, a varias personas.

El secretario de Estado de la Comunicación, Mario Dupuy, emitió un mensaje a través de la radio llamando a «las autoridades de la universidad a asumir sus responsabilidades».

Dupuy acusó a los estudiantes de «haber querido entrar en el Palacio Nacional» y aseguró que la Policía fue atacada por los manifestantes.

Por su parte, Evans Paul, uno de los portavoces de la oposición y ex alcalde de Puerto Príncipe, manifestó que los estudiantes y la Policía habían llegado a un acuerdo para que el cortejo con los restos de Desulmon hiciera su recorrido sin incidentes.

«No hay una zona prohibida en Puerto Príncipe», afirmó Paul en declaraciones a la prensa.

Otra manifestación convocada también en la capital haitiana por los estudiantes universitarios transcurrió el jueves de forma pacífica.

La tensión se extiende también hoy a otras ciudades de Haití, en especial a Saint-Marc (centro-oeste), donde existe el riesgo de enfrentamientos violentos entre partidarios del poder y manifestantes antigubernamentales.

[b]OEA condena sabotaje radios[/b]

PUERTO PRINCIPE (AFP).- La misión especial de la Organización de Estados Americanos (OEA) en Haití expresó el viernes su «viva preocupación», después del sabotaje perpetrado el martes contra ocho estaciones de radio y una de televisión en la capital haitiana.

En un comunicado, la misión consideró que «tales actos ya se han producido contra estaciones de radio en provincia» y demandó a las autoridades competentes una «investigación seria» a fin de «descubrir a los autores y los instigadores (de esos actos) y de llevarlos ante la justicia».

«La libertad de prensa es una de las principales logros de la democracia, y todo atentado en contra de los medios de comunicación, no puede contribuir a la edificación de un estado de derecho en Haití, subrayó el comunicado de la organización interamericana.

El sabotaje contra las estaciones de radio ya fue condenado por los gremios de periodistas y de los medios, como la Asociación Nacional de Medios de Haití (ANMH), que anunció que emprendería procedimientos judiciales.

Políticos de la oposición y del partido oficialista Lavalas también denunciaron el hecho.

El embajador de Estados Unidos en Haití, James Foley, ha igualmente condenado el hecho, al igual que su homólogo francés Thierry Burkardt, quien la ha calificado de «inaceptable» y ha subrayado que no favorece a los compromisos políticos en el país.

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