Recuperan unas 50 computadoras y tables, dos armas de fuego y tres vehículos
Agentes de la Dirección Central de Investigación (Dicrim), en coordinación del Ministerio Público, capturaron dos delincuentes, señalados como los cabecillas de una banda dedicada a cometer robos en vehiculos dejados estacionados en calles de sectores exclusivos del Gran Santo Domingo y otros puntos del país.
Se trata de Natanael Yoli Ozoria y Luis Javier Pilar, ambos mayores de edad, quienes, según el informe preliminar, estos aprovechaban que las víctimas estacionaran sus vehículos para robar una variedad de artículos, incluyendo equipos electrónicos, dinero en efectivo, placas de matrícula, pertenencias personales y armas de fuego.
Durante varias intervenciones y labores de inteligencia, las autoridades incautaron unas 50 computadoras, dos armas de fuego, una consola de videojuegos, un dron y tres vehículos de distintas marcas y modelos.
Estas propiedades se encuentran bajo la custodia del Ministerio Público, que está realizando las investigaciones pertinentes para esclarecer la magnitud de los delitos cometidos y establecer posibles conexiones con otros casos similares.
Modus Operandi
Los presuntos antisociales empleaban diversas tácticas para perpetrar sus actividades ilícitas, incluyendo el alquiler de vehículos de alta gama, a los cuales instalaban placas que previamente robaban a automóviles similares. Esta operación dificultaba la ubicación de los delincuentes, quienes quedaron captados en videos de vigilancia en zonas donde perpetraban robos.
Durante el proceso investigativo, direccionado por el fiscal Reginaldo Contreras, se realizaron múltiples intervenciones y allanamientos, logrando establecer que los ahora detenidos tras cometer los robos utilizaban a terceros para limpiar los equipos sustraídos y para comercializarlos a través de páginas web.
En ese sentido, la Policía Nacional y el Ministerio Público, reafirman su compromiso con la protección de los ciudadanos y la preservación de la seguridad ciudadana. Asimismo, hacen un llamado a la comunidad para que presenten sus respectivas denuncias tan pronto sean víctimas de la delincuencia.