Arte en mosaico

Arte en mosaico

POR CLARA SILVESTRE
Esta vez, los mosaicos de Empresas Aguayo tienen un toque muy femenino y especial. Y es que como explica Jorge Aguayo, Elsa Núñez ha plasmado de manera particular su arte y estilo, muy ligado a la naturaleza; con el detalle de que siendo tan femeninos, son lo suficientemente adaptables y flexibles a cualquier tipo de arquitectura y de ambiente.

Dijo que a pesar de dejar ver un cierto aire minimalista y cierta inspiración oriental, están muy identificados con lo que es nuestra cultura, estos son: “Ramillete”, “Mariposa de primavera” y “Cayena”.

Explica que para la creación de estas colecciones se han concentrado en artistas emblemáticos de la plástica dominicana, como el caso de Cándido Bidó y Thimo Pimentel, anteriormente, y Elsa Núñez ahora, quien es la primera artista femenina que forma parte del proyecto de colección.

Al indicar que el proceso para una línea nueva comienza ocho o nueve meses antes del lanzamiento, también señaló que para la empresa ha sido un honor poder trabajar con Elsa Núñez, “y la verdad es que ha sido una experiencia preciosa trabajar con ella, muy dispuesta a colaborar, muy entusiasta con los resultados, un apoyo enorme, un toque femenino que nunca lo había tenido. La verdad es que nunca habíamos tenido una colección tan delicada como ésta y estamos muy contentos con ella”.

La nueva colección se presentará en una convención internacional de diseño de interiores que se realizará en Chicago, lo que Aguayo considera de gran importancia, porque el mosaico dominicano se abriría una puerta a un público diferente que no conoce el mosaico y donde anteriormente no se había presentado.

Agregó que actualmente en Estados Unidos se ha producido un ‘boom’ muy grande hacia utilizar recubrimientos de pared y de pisos como elementos de decoración, y no solamente funcionales, lo que hace natural que se busquen opciones que le den un toque a las construcciones.

El mosaico artístico dominicano

Empresas Aguayo ha presentado durante tres años una nueva colección de mosaicos con maestros de la plástica dominicana. El año próximo incluirá a artistas jóvenes, a fin de darle cabida al talento joven.

Las colecciones de mosaicos artísticos de empresas Aguayo se iniciaron con el objetivo de promover el mosaico como una pieza de arte para ser utilizada en pisos y paredes, a fin de que éste pudiera volver a ser parte de la arquitectura moderna dominicana de hoy día, porque lo ha sido en épocas anteriores.

En ese sentido, Jorge Aguayo explica que a nivel nacional, el mosaico se encuentra en una etapa de transición, porque ya se ha comenzado a valorar el mosaico otra vez como lo es, como una pieza de artesanía, específicamente una artesanía dominicana que se integró a la arquitectura dominicana en la época republicana y que se adaptó a lo que era el folclore y el gusto dominicano, los colores y la forma.

Destacó que hoy sigue su proceso de transformación y adaptación a lo que los arquitectos de hoy en día requieren, consiguiendo que el mosaico se vuelva a ver como lo que es, una pieza de arquitectura y ambientacion para los espacios.

Recordó que cuando se realizaban los censos en años atrás, se llenaba un renglón sobre el tipo de vivienda, y en primer lugar estaba el mármol, luego sucesivamente, la cerámica, el granito, el mosaico y por último la tierra, es decir que el mosaico se encontraba en los últimos niveles, lo que indica que se había perdido un poco el encanto del mosaico.

Es así que detalla que este tipo de colección se elabora a fin de que se vuelva a ver y a entender que realmente es un producto artístico, artesanal, y un producto de primera, “el mosaico verdadero es el artesanal, porque es ese que se hace a mano. Muchas personas confunden mucho otros materiales con el mosaico, el cual tiene un costo más elevado que otras opciones, lo que hace que se reduzca su público, pero también le eleva un poco el nivel”.

Aguayo ofrece los diseños tradicionales, en otros casos los mismos arquitectos diseñan sus modelos, y también se han recreado los diseños antiguos, colecciones especiales para diseñadores extranjeros, y cada año se continuará con esta tradición de arte en mosaico, pero con la inclusión de artistas jóvenes, a fin de darle cabida al talento joven.

Al destacar que un mosaico es ligeramente diferente de otro, aun sean iguales, en donde hay diferencias que le dan su personalidad al mosaico, pero errores que sencillamente no se pueden aceptar, porque le cambian la esencia del producto, dijo que existen dos pasos muy importantes en el proceso de elaboración, porque un diseño puede ser muy bonito en papel pero al llevarlo al proceso de elaboración, podría no servir porque no se adapta, y en otro orden, la elaboración en sí, que incluye el dominio de los colores donde más cuidado hay que tener.

Agregó que es por eso que las personas poseen muchos años de experiencia, muchas de ellas incluso aprendieron el oficio de sus padres, pero por otro lado el oficio de ser mosaísta, requiere de mucha concentración y cuidado, porque la forma de tirar el color en el molde, puede cambiar el aspecto del mosaico, mancharlo y dañarlo.

“Las piezas hechas a mano tienen una tendencia muy grande a volver a lo que eran las piezas calidad, con carácter, originales. Es una tendencia nueva que ha cogido un repunte muy grande, y ahora hay una tendencia muy fuerte a lo que es usar productos que son ecológicamente amigables; y era algo en lo que no hubiera puesto a pensar hasta que alguien me indicó que nuestro producto lo era”, agregó.

Esto, porque no contribuía a la contaminación, por la cantidad de energía invertida en su producción y el impacto social que tiene tu producto en el proceso de fabricación: los mosaicos no tienen que ir a un horno, y requieren un proceso natural, es un producto hecho a mano donde hay muy poca maquinaria involucrada, por lo que la cantidad de energía que se usa es menor, lo que indica que es ecológico. Pero por otro lado, al ser un producto artesanal, necesita de la mano de obra de mucha gente, lo que hace que la riqueza se distribuya más a nivel social, y lo convierte también en socialmente responsable, cumpliendo con lo que llama responsabilidad social.

En esta ocasión es la labor comunitaria que realiza Oscus, a fin de trabajar con la juventud que se encuentra en alto riesgo de abusos y vicios, entre otros.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas