Con gran alegría y entusiasmo fue recibido el artista visual internacional, Ghass Rouzkhosh en la provincia Monseñor Nouel, donde fue reconocido por la Fundación Bonao para la Cultura por sus aportes al arte y la cultura a nivel internacional.

El pintor iraní, quien también recibió un ramo de rosas y hortensias blancas como símbolo de la paz, además de un girasol en representación del sol que ilumina el universo, manifestó su agradecimiento y regocijo por la distinción otorgada en la tierra del pintor dominicano Candido Bidó.

Durante su visita por Bonao, el artista acudió a la tumba del maestro Candido Bidó para solicitar permiso y poder pintar en su museo.

Consideró de gran importancia hacer este gesto, pues asegura, que el respeto a los maestros del arte es vital para el desarrollo y evolución artística sin dejar atrás el camino recorrido y a quienes transitaron en él.

En el homenaje, Ghass expresó que, aunque no habla español, se siente como dominicano porque como hombre y artista se considera «sin fronteras».

Agregó que, tiene una firme convicción de que con el arte y la cultura se pueden conseguir grandes transformaciones sociales que cambien el rumbo del mundo.

«Yo creo que con el arte y la cultura podemos crear un mundo mejor para los niños», dijo a modo de reflexión tras compartir su experiencia cuando vió niños andar en motocicletas en su trayecto a Bonao.

Al contar su historia y visión artística, Ghass indicó que, escogió a la República Dominicana, como el primer país de su agenda donde procura mostrar y plasmar su arte, dejando una de 13 obras emblemáticas alrededor del mundo.

En ese sentido, el pintor internacional obsequió una pintura a la referida fundación, hecha por él en el transcurso de su visita.

Recorrido por RD

Durante su permanencia en el país, el pintor visitó también la embajada de Francia, así como, a Carolina Mejía, alcaldesa del Distrito Nacional, quienes valoraron la entrega y dedicación del artista.

El artista llegó a la República Dominicana para presentar su programa Puertas de Naciones, con la intensión de instalar una escultura monumental llamada ENERGY FOR ALL (Energía para todos).

Indicó que «las fronteras nos sirven como punto de reflexión y convergencia y no de división entre hombres cuyo interés común es el de luchar por la paz en el mundo».

Orígenes

Ghass Rouzkhosh comenzó a pintar a la edad de 8 años y a los 15 le tocó vivir el impacto de la revolución y el conflicto Irán-Irak.

Sufrió 8 años de guerra incluyendo dos en el frente como conductor de ambulancia desde los albores de estos 20 años cuando descubrió los horrores de la guerra al ver a sus camaradas caer en combate.

Tras dejar su país en 1989, más tarde comenzó su investigación sobre los temas del arte imaginario y la dimensión simbólica de las formas.

A pesar de los pesados recuerdos, Ghass buscó dominar los aspectos oscuros de su historia y convertirlos en algo terapéutico para él pero también para el público en general.

Sus cuadros representan los actos del hombre para que asuma las consecuencias, para mostrar su lado egoísta, oscuro e invisible.