El economista Arturo Martínez Moya dijo que el  incumplimiento de la meta fiscal por parte del Gobierno con relación al compromiso que había  hecho con el Fondo Monetario Internacional (FMI)  es una situación  crítica.

Explicó que   respecto a la ejecución  presupuestaria de este año el Gobierno se comprometió  con el FMI a cerrar con un déficit de RD$33,548 millones, equivalente a 1.6% del Producto Interno Bruto (PIB).

  “Y resulta, sin embargo, que el déficit supera los RD$61,000 millones, 3% del PIB, acumulando un desbalance en las cuentas públicas de RD$225,000 millones en los años 2008-2011”, señaló el doctor Martínez Moya, en una entrevista a este diario.

El Gobierno no superó la séptima revisión del programa del FMI, con fecha 15 de septiembre, y tampoco la octava revisión del 15 de diciembre, razón por la que técnicamente el acuerdo “stand by”  está suspendido, destacó  el economista.

 Como  consecuencia, el país deja de recibir desembolsos por US$740.9 millones de los organismos internacionales, dijo.

 Destacó que el crecimiento del PIB, que  este año rondará el 4.0%,  representa “una caída significativa respecto al 7.8% del 2010 y el promedio de 7.5% del período 2005-2010”. La   inflación del año de  alrededor de 8.5%, es muy superior al promedio de 6.3% del periodo 2005-2010, recordó.

Sobre el  endeudamiento,  estimó la deuda  pública total del país al cierre de este año en unos  US$24,000 millones, “casi la mitad de lo que producimos en un año, con una presión del servicio de la deuda de 40% sobre los ingresos corrientes”.

Incluye la deuda no computada del sector eléctrico, con contratistas del Estado y la del Banco Central, ésta última ascendente a RD$240,618.2 millones a principio de diciembre de 2011, dijo. Si se  incluyen los depósitos remunerados de corto plazo, los valores suben a RD$270,332.1 millones, que comparados con RD$87,412.1 millones a agosto de 2004, “significa que aumentó tres veces”.

Perspectiva de la economía en 2012

Arturo Martínez Moya pronosticó que a  mediados de 2012 se  habrá ejecutado casi la totalidad del verdadero presupuesto de ese año. Y   será necesario revisar el presupuesto  para ajustarlo a la realidad.

  Su argumento es que en diciembre en curso  ilegalmente el Gobierno inició la ejecución del presupuesto de 2012. Y la temprana en ese sentido combinado con la sobre estimación de los ingresos, implica que a mediados de 2012 se habrá agotado ese presupuesto.

Prevé también que el Gobierno no  contará  con las facilidades de financiamientos internacionales que tuvo durante la vigencia del “stand by” con el FMI, y su impacto en el crecimiento será menor al reducirse el consumo y la inversión pública.

Y la inversión privada no contará  con los incentivos necesarios, por lo que se hará  urgente reorientar la política pública, concluyó el economista Martínez Moya.