POR DIOMELO MARTINEZ
Arturo Sandoval y la Santo Domingo Jazz Big Band matuvieron la atención del público durante más de dos horas en un concierto de mucha calidad, presentado el sábado en el teatro La Fiesta del Hotel Jaragua. Contó con el patrocinio de Pinturas Tropical y el Periódico HOY, entre otras empresas.
El trompetista cubano de renombre internacional apareció en el escenario a las 10:45 de la noche y marcó un clásico de Dizzy Gillespie, lo que dio paso a la ambientación de una noche memorable para los fanáticos del jazz. Con el acompañamiento magistral de la Santo Domingo Jazz Big Band, el virtuoso prosiguió su camino musical pisando las hojas de su repertorio.
Inhumano y extraterrestre, fueron algunos de los epítetos que el público profirió a este artista que con su instrumento a cuesta parecía inmune a tanta admiración.
Fueron alrededor de diez temas los ejecutados por el responsable de los song tracks de las películas Mambo Kings ,Havana y For love or Contry, pero la esfervescencia llegó al climax con la interpretacion en el timbal de una serie de mambos de Pérez Prado, lo que hizo que el público aplaudiera sin parar. En cada una de las piezas el músico demostró su gran destreza como timbalero.
Arturo Sandoval, que también es pianista, interactuó haciendo bromas, chistes y anécdotas, mientras la gente le solicitaba temas.
Sinceramente que contento estoy de estar aquí, frente a ustedes y acompañado de una formidable orquesta de grandes músicos, de la cual ustedes y nosotros debemos sentirnos orgullosos, dijo refiriéndose al acompañamiento de la Santo Domingo Jazz Big Band.
Agradeció a la concurrencia por asistir a ver el concierto de una música que calificó de buena, profunda y que realmente necesita de personas inteligentes que la disfruten, la entiendan y la apoyen.
DEL MERENGUE
Arturo aprovechó la ocasión para hacer referencia al merengue, previo a entonar el tema Perdido, del maestro Juan Tizón. Lo tocó en la línea dominicana, de la mano del Crispín Fernández.
El merengue es un ritmo rico, con una fuerza increíble, y para bailar es una de las cosas más rica que existe. Es uno de los pocos ritmos que compite con Cuba a nivel internacional.
Exhortó a los directores de la Santo Domingo Jazz Big Band a introducir más merengues a su repertorio, para rendir honor a la música nacional del país.
Durante la ejecución de Perdido, el maestro cubano dirigió la Big Band. La rica fusión de instrumentos provocó que el público se levantara de sus asientos.
Sandoval, que tiene en su haber cuatro Grammy, seis Billboard y un Emmy, pretendió cerrar el concierto con el mencionado merengue.
La solicitud del público lo obligó a regresar, para cerrar con Mambo No. 8, de Pérez Prado.
UNA GRAN BANDA
La Santo Domingo Jazz Big Band es una gran orquesta, integrada por reconocidos músicos dominicanos, que tiene en la palestra alrededor de dos años proyectando uno de los mejores repertorios. Es dirigida por los maestros Grispín Fernández y Pengbian Sang. Ellos también son protagonistas de la calidad que musical presentada el sábado en el Jaragua, donde asistió una una cantidad de personas.
Es una lástima que no estemos grabando un video de ésto, para mostrarle al mundo el tipo de orquesta que existe en Santo Domingo, fueron las palabras de Arturo Sandoval hacia la Santo Domingo Jazz Big Band, a la que le dio todo el mérito.