La conformación y funciones de la Junta Central Electoral (JCE), cuyo número de miembros sería reducido a tres o cinco, como recomienda el presidente Leonel Fernández en su propuesta de reforma a la Constitución, despuntan como los temas dominantes que la Asamblea Revisora debatirá esta semana, junto a los artículos que tratan sobre el Congreso Nacional, el medio ambiente y la familia.
Los asambleístas se reunirán este martes y miércoles a partir de las 3:00 de la tarde y el jueves a las 9:00 de la mañana, para recibir los informes de las comisiones de trabajo sobre los citados temas.
Lo relativo a la JCE está pendiente en una comisión presidida por el asambleísta Charlie Mariotti, quien solicitó y obtuvo una ampliación del plazo a fin de rendir el informe correspondiente el jueves próximo.
Esta comisión ya celebró una reunión la semana pasada en la que los miembros de la JCE se mostraron divididos respecto a la composición y funciones de la institución que está encargada de organizar y celebrar las elecciones.
Incluso, el presidente de la JCE, doctor Julio César Castaños Guzmán, favoreció en la reunión realizada en el Congreso que la matrícula de la institución sea reducida de nueve a cinco personas.
Sin embargo, planteó que en razón de las múltiples subcomisiones existentes, dependientes del pleno, el número no alcanzaría para cubrir esos puestos.
Mariotti informó que predomina entre los asambleístas la reducción de la matrícula de la JCE a tres y la conformación de un tribunal contencioso electoral.
Otros asuntos
Los temas subsiguientes que abordará la Asamblea en los días por venir son igualmente fundamentales, por lo cual se prevé que tengan que ir a comisiones de estudio.
Éstos son los relativos a la reelección presidencial, el Poder Judicial, las funciones que debe tener el Poder Ejecutivo y los controles interno y externo del Estado, a saber, la Contraloría General de la República y Cámara de Cuentas.
Entre éstos figura también el sistema financiero y monetario.
Aprobados. Entre los aspectos más controvertidos de los 84 artículos ya aprobados en primera lectura, de la propuesta de 254 sometida por el presidente Leonel Fernández, figura el artículo 30, que trata sobre el respeto a la vida desde su origen, a través del cual se prohíbe toda forma de aborto, incluso el terapéutico.
Asimismo, la nacionalidad, mediante un artículo que prohíbe esta condición a los extranjeros indocumentados y sus hijos.
La aprobación del artículo 30 ha levantado una serie de protestas de entidades y personas que entienden que el aborto debe ser permitido, sobre todo cuanto pone en peligro la vida de la embarazada.
Por la fama
Entre las causas de la lentitud con que marcha el proceso de reformas a la Constitución, el asambleísta Charlie Mariotti, representante de Monte Plata, señaló ayer la búsqueda del minuto de fama y el vedetismo o tongolelismo de muchos miembros de la Asamblea Revisora. Sin embargo, dijo que también hay desinterés a causa de los temas impuestos por los acuerdos políticos.
Imposición
La reforma a la Constitución sería el resultado de lo pactado por los partidos políticos y no, como debería ser, de los miembros de la Asamblea Revisora, afirmó ayer el senador Charlie Mariotti, quien lamentó que los asambleístas que se dedicaron a estudiar el proceso tengan ahora que limitarse a levantar la mano.
El representante de Monte Plata dijo que la razón fundamental por la cual han fracasado varias convocatorias a la Asamblea Revisora son el desaliento y poco entusiasmo que tienen los congresistas para continuar con los trabajos, porque, sostuvo, sienten que ya no tienen nada qué aportar.
Mariotti expresó que, si bien los senadores y diputados están de acuerdo con lo pactado por el gobierno y las dirigencias de los partidos de oposición, al menos debió haber un punto de equilibrio para que los asambleístas no se sintieran como si estuvieran marginados del proceso.
Subrayó que legisladores que se dedicaron afanosamente a estudiar las reformas planteadas, en interés de aportar algo al proceso, han tenido que conformarse con levantar la mano, ya que todo ha sido decidido y determinado en los acuerdos suscritos entre el gobierno y las fuerzas políticas.
Dijo que hubiera sido mejor que el liderazgo político nacional se pusiera de acuerdo en dos o tres temas fundamentales de la Reforma Constitucional y dejara trabajar libremente a los asambleístas.
De esa manera, expresó, se dejaba que el asambleísta cumpliera con su deber constitucional y la ciudadanía pudiera ver cuáles son los hombres y mujeres mejor intencionados y con capacidad de representarlos dignamente.