El ex combatiente de la guerra de abril de 1965 Claudio Caamaño Grullòn, proponente de la creación del Parque Nacional Francisco Alberto Caamaño Deñó, declaró hoy que al hacerse las delimitaciones de la zona se tomó el cuidado de reconocer los derechos adquiridos de Cementos Santo Domingo y otras empresas, tras indicar que éstas «operaban allí con anterioridad a declararse la reserva, ya que la planta estaba ubicada 10 años antes del decreto que creó el parque en 2009».
Caamaño Grullón precisó que está sorprendido de que el Ministerio de Energía y Minas «ataque» los derechos adquiridos en ese espacio por la familia Abinader-Corona, «cuando las delimitaciones hechas se han establecido por acuerdos amigables entre el Ministerio de Medio Ambiente y las empresas que operan en la zona».
Puntualizó que la razón de la creación del parque es más histórica que ambiental, ya que es una zona de poco valor forestal o ecológico, y que incluso de los 634.6 kilómetros cuadrados, 288.8 son terrestres, y 345.8 corresponden a la parte marina.
El ex guerrillero subrayó que hacía la aclaración motivado por su interés en que prevalezca la verdad histórica sobre el tema, en razón de que fue proponente de que el referido parque lleve el nombre de su Comandante, el héroe nacional Francisco Alberto Caamaño Deñó, quien junto a él y otros guerrilleros protagonizaron en 1973 el desembarco de Playa Caracoles, internándose luego por las áridas estribaciones de la zona.
Agregó que está consciente de que Cementos Santo Domingo trabaja en una zona mucho más reducida de lo que es su extensión territorial y de que en todo momento ha cumplido con las normas de manejo ambiental establecidas por las autoridades, a lo que él ha dado seguimiento como parte interesada por la vida del parque.