POR ODALIS MEJIA
Familiares, vecinos y amigos del joven Fabián Quezada, de 21 años,  asesinado por desconocidos  próximo al kilómetro 10 y medio de la carretera Sánchez, exigieron justicia para los responsables de esa muerte, ocurrida el pasado viernes primero de abril.

Según la madre de Quezada, María Germán, éste fue asesinado luego de una discusión que sostuviera con el portero de un billar próximo a su casa,  porque supuestamente no le  dejaron entrar junto a varios amigos. Dijo que la noche del crimen se produjo una discusión con los responsables del negocio, quienes alegadamente empezaron a lanzar botellas a los jóvenes y luego tiros,  uno de los cuales hirió mortalmente a Quezada.

Explicó que al momento ella se encontraba próximo al lugar a donde acudió, junto a su otro hijo Juan Carlos, de 18 años, al enterarse de que su pariente estaba en problemas, por lo que ambos pudieron observar cómo Fabián fue asesinado.

Aunque no identificaron quien disparó, criticaron que hasta ahora nadie haya  sido apresado por el crimen, tras lamentar que cuando ocurrieron los hechos, una patrulla policial se encontraba próximo al lugar, pero que, según los agentes, no intervinieron por temor a que fueran rotos los cristales del patrullero.

Ambos familiares hablaron junto a un grupo de vecinos y amigos del joven asesinado, quienes protestaban en demanda de justicia próximo a la zona donde fue muerto.

Los vecinos mostraron su temor de que nadie sea acusado por el crimen, ya que supuestamente  el propietario del billar es un general pensionado de la Marina de Guerra, y porque luego del hecho, el negocio fue cerrado, aparentemente como forma de eludir responsabilidad.

En la protesta participaron los presidentes y miembros de las juntas de vecinos de los sectores Luz Consuelo y 16 de Agosto, donde residió el joven,  quienes rechazaron que el muerto fuera un delincuente y drogadicto como afirmaron supuestamente la Policía y los autores del crimen, en una aparente manera de justificar el asesinato.