Ramón Antonio Salcedo 
Zambrana, Cotuí. Concluyó en completo orden y de manera pacífica la maratónica marcha contra la minera Barrick Gold.
La actividad unificó a manifestantes de Cotuí y de Maimón frente a la entrada a la mina de oro y plata pasado el medio día.
Una vez allí, hicieron uso del micrófono el activista Fernando Peña, los dirigente campesino de las comunidades en lista para ser reubicadas, Martín Guzmán y Manuel Severino.
También hablaron sacerdotes católicos de Sanjuán de la Maguana, Moca, Bonao y Cotuí.
Todos coincidieron en demandan la realización de un proceso de reubicación justo y sin atropello a las familias de las comunidades de el naranjo, lajas, el higo, el rayo, las tres bocas y arrollo vuelta.
Denunciaron que con las operaciones mineras en pueblo viejo Cotuí, varios ríos han desaparecido, lo que definieron como un crimen ecológico y un atentado contra la vida humana, vegetal y animal en zona.
A la llegada de los manifestantes a la entrada de la minera, fue colocado un bloqueo policíaco-militar en la entrada principal de la compañía, cuyas puertas de entradas estaban cerradas por asunto de seguridad.
Aunque en principio los organizadores de la marcha anunciaron que entregarían un documento a un representante de la minera, esto no fue posible porque las áreas de recepción en el portón de entrada estaban acéfalo y cerradas.
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