Se inicia un nuevo año escolar y el caos del tránsito en nuestras calles aumenta. Debemos llevar los niños a sus centros de estudios de manera segura, ya que el estrés y la prisa por llegar a tiempo al trabajo o al lugar de estudios pueden alterar la forma en que conducimos y debemos aplicar las medidas de seguridad necesarias para evitar perder el control y que se produzcan accidentes.
Además, debemos mitigar los daños en caso de accidente, utilizando asientos especiales para proteger a los más pequeños.
Los fabricantes de vehículos incluyen en sus manuales los requisitos que se deben cumplir como una advertencia o aviso para garantizar el transporte seguro de los niños.
Entre ellas tenemos que los asientos especiales para niños no deben colocarse en los asientos delanteros por los riesgos asociados a la activación de las bolsas de aire en caso de accidente.
El lugar más seguro es el asiento central trasero, sin embargo es más práctico colocarlo en el asiento trasero derecho (detrás del pasajero) donde podrá abrir la puerta sin riesgo de ser atropellado.
Los asientos especiales para niños varían de acuerdo a la edad, peso y tamaño del infante:
Los asientos orientados en dirección contraria a la marcha son los mejores para los niños. Tienen un arnés y, en caso de accidente, se mece y mueve con el niño reduciendo el esfuerzo y la presión en el frágil cuello y la columna vertebral del pequeño o pequeña. (Menos de 20 libras y hasta los tres años).
En los asientos que miran hacia el frente, orientados en dirección de la marcha, el arnés hace contacto con el niño en las partes más fuertes del cuerpo para distribuir las fuerzas de choque y mantenerlo en el asiento.
La correa de sujeción del sistema de anclaje limita el movimiento de la cabeza hacia adelante. (Se usa para menores entre 20 y 40 libras o de uno a siete años).
El asiento elevador tipo “booster” posiciona el cinturón de seguridad para que se ajuste correctamente sobre las partes más fuertes del cuerpo del niño. Esto puede ayudar a reducir las lesiones durante un choque. (Es el adecuado para más de 40 libras o 12 años y menos de 4 pies 9 pulgadas de altura).
La sección IV de la Ley núm. 63-17, de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial, aborda el tema del transporte de niños. Establece que hasta la edad de doce años serán transportados en los asientos traseros del vehículo, salvo en los casos en que se trate de vehículos tipo camioneta de una cabina.
Los niños hasta seis años serán transportados en un asiento especial para infantes con posición de rostro hacia el frente y los mayores de seis años y hasta los doce años deberán utilizar un elevador que les permita colocarse de manera segura el cinturón de seguridad trasero.