POR ALEIDA PLASENCIA
En el proyecto de  frutales que desarrolla  la Misión Técnica de Taiwán en Baní  hay cultivada   una gama de variedades  de guayaba, carambola dulce, anón, y  ponsere,  provenientes de la República China, en  una extensión de 95 tareas,

 También han extendido variedades de mango, aguacate y limón.  En el marco del proyecto se han construido viveros, centros de acopio e invernaderos.

En los últimos tres años se reprodujeron 24,800 plantas de guayaba; 92,300 de aguacate; 16,700 de mango; 1,860 de ponsere; 5,230 de carambola y 620 de anón.

Con este proyecto, que  se implementa    en una finca del Instituto de Desarrollo de Investigación Agropecuaria y Forestal (IDIAF), la Misión Técnica de Taiwán busca promover en el país la producción de frutales con  nuevas variedades  y métodos modernos que generen elevada productividad y frutas de excelente calidad.

También busca establecer una estación experimental,  construir viveros para propagar plantas y compartir métodos con los agricultores.

  La finca cuenta de cuatro partes: una parcela de demostración, un banco de yemas, un área de observación y selección, y una comercial. En el marco del proyecto la Misión Técnica de Taiwán produce plantas frutales para las necesidades de la Secretaría de Recursos Naturales, el IDIAF y otras dependencias del Estado con fines de reproducción.

Ofrece además,  plantas  a precios bajos a los campesinos para la reproducción de las nuevas variedades.  Vende cada planta de guayaba a RD$60; la de carambola a RD$40; entre RD$70 y RD$100 la de ponsere; a RD$30  la de anón y a RD$15 la de aguacate, mango y limón.

En un recorrido, en compañía  de  autoridades de la Secretaría de Medio Ambiente, el embajador de Taiwán en el país, Eduardo Chen, explicó las bondades del proyecto, iniciado en 2003.

En éste, la Misión también produce planta injertadas.

Peces y camarones

El recorrido incluyó también un proyecto piloto acuícola en Puerto Viejo, Azua,  que funciona mediante convenio entre los  gobiernos  de la República China, Taiwán, y de República Dominicana, en una extensión de 37 hectáreas. Allí la Misión ofrece asesoría técnica para la producción de peces y camarones. El área donde producen los camarones no fue visitada, pues éstos fueron barridos por las aguas de la  tormenta Noel.

En  la estación modelo de los peces hay varias piletas donde se desarrollan los  alevines. Próximo están los estanques, donde se llevan los peces para fines de engorde y luego son  comercializados.

Esta estación modelo tiene entre sus objetivos reproducir peces para disponer de alevines que son utilizados en poblar lagos, ríos, presas y lagunas. El proyecto tiene la finalidad también de capacitar a productores y técnicos de diferentes puntos del país en la crianza de peces y camarones, según dijo el embajador Chen. Además, realizar engordes de peces para  mejorar la dieta de los dominicanos.

Logros en cinco años

Asistencia técnica en distintos puntos del país.

Producción de dos millones de alevines y 1.5 millones de peces distribuidos en diferentes fuentes de agua del país.

Unos 2,243 pescadores beneficiados y 150,000 unidades de alevines vendidas para reproducción.

Para fines comerciales, 12,000 libras de pescados vendidas.

En término de capacitación,    225 personas beneficiadas, entre técnicos,  productores y pescadores, a través de   16 cursos. Estos, además de los  dominicanos, han favorecido   8 haitianos, para fines de propagar en Haití técnicas adecuadas para la crianza de peces y camarones. 

Se han beneficiado a través de  prácticas 150 estudiantes de acuicultura del Politécnico de Azua.

Realización de ensayos con diferentes fórmulas alimenticias para evaluar el crecimiento de los peces.