POR ALEIDA PLASENCIA
La Asociación Dominicana de Almacenistas Importadores (ASODAI) criticó que en el proyecto de ley de reforma fiscal que estudia el Congreso, no se incluya el desmonte de la comisión cambiaria.
Domingo Espinal Collado, presidente de la ASODAI, entrevistado en el Encuentro Económico de HOY, resaltó que en el proyecto en cuestión, tampoco se toca el aspecto de la comisión cambiaria.
Lamentó esa situación, por entender que la comisión cambiaria es uno de los elementos de mayor distorsión en estos momentos en la economía, la cual es objeto incluso de observación por parte de los países con los cuales la República Dominicana ha firmado tratados de libre comercio».
Según un programa de desmonte de la comisión cambiaria, aprobado por la Junta Monetaria el 25 de febrero del 2003, el gravamen de ésta sería desmontado en 0.25% trimestralmente a partir de octubre de ese mismo año, para quedar totalmente eliminado en el 2008.
Para esa ocasión, diferentes sectores del país expresaron sus quejas porque, a su juicio, era excesiva la gradualidad contemplada en el programa de desmonte aprobado por la Junta Monetaria.
Sin embargo, ocurrió que ante los problemas que se presentaron en el cumplimiento del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y que provocaron una primera interrupción del mismo, la Junta Monetaria echó para atrás el programa de desmonte y, por el contrario, dispuso la elevación de la comisión cambiaria de 4.75% a 10%, el 22 de octubre del 2003.
Según la opinión de Espinal collado, la comisión cambiaria viene a ser un sobre arancel y «es, naturalmente, un gravamen sumamente fuerte, pues estamos hablando de un 10%».
Señaló que eso implica que los productos que pagan un arancel de 20%, más la comisión cambiaria, son objeto de un arancel efectivo de 30%.
A esto se le agrega una serie de gravámenes adicionales que se les han puesto a las importaciones, indicó.
Dijo que esta situación no sólo afecta los productos terminados e importados, como se plantea muchas veces, sino también a los de fabricación nacional.
Al respecto, resaltó que los productos de fabricación nacional tienen un gran componente de elementos importados, como maquinarias, materias primas e insumos.
«Y eso es parte de los componentes de precios y de la estructura del costo del producto final y afecta a todos los ciudadanos y especialmente a los más pobres», indicó.