POR MODESTO RODRIGUEZ
El presidente de la Asociación de Ferreteros (ASODEFE), Luis Mejía, propuso a las empresas extractoras de materiales en los ríos que para viabilizar la resolución 16-2007 de la secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, negocien un plazo con los dueños de los terrenos o las concesiones mineras, para la adquisición de canteras secas.

Mejía dijo reconocer el alegato de los granceros de que para mantener el ritmo de elaboración de material agregado y el suministro de 12 mil metros cúbicos diariamente, necesitan comprar los terrenos donde hay yacimientos y para eso se requieren recursos.

“Ellos deben negociar a plazos con los dueños de las minas de depósitos secos, es decir fuera de los ríos, para dar lugar a la resolución 16-2007 y mantenerse operando, de manera que no se interrumpa la producción de agregados, ni se provoque una escasez que pueda alterar el mercado y los precios de esa materia prima”, dijo Mejía.

La secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, emitió la resolución 16-2007 que dispone que las granceras dejen de extraer material volcánico de los ríos, pero la Asociación de Productores de Agregados, y su director ejecutivo, Teófilo Hernández, han advertido que la medida debe realizarse con toda cautela, porque el mercado metropolitano consume 12 mil metros cúbicos diarios de material y que se debe saber de dónde se va a extraer y si el volumen requerido puede asegurarse.

Hernández, también manifestó que es bueno que se sepa que la mayoría de las propiedades donde fueron identificadas canteras secas, están concesionadas por la Dirección General de Minería.

IMPORTACION

Luis Mejía dijo que con la importación de unas 300 mil fundas de cemento desde Asia para la primera quincena de este mes, se espera que usando como referencia el mercado internacional, se puede estabilizar en el país el precio de un producto vital de la industria de la construcción, que genera más de un millón de empleos.

Estimó que la venta será un 15 a un 20% por debajo del precio a como venden los productores de cemento actualmente y con una referencia internacional.

“Tenemos la plena seguridad de que finalmente con esta importación se beneficiarán los consumidores y los agentes de la industria de la construcción local”, señaló Mejía.

Agregó Mejía que en venta de cemento se ha creado “un yugo” interpuesto por un oligopolio que dirige la empresa que tiene el 60% de la producción y del mercado, y que esperan, sino romperlo, al menos darle al consumidor otras opciones y más baratas.

Con su importación, que representa el 4.2% de la producción mensual de cemento en el país, los ferreteros, tendrán el 60% de sus necesidades de distribución cubiertas y mantendrán un espacio de un 40% para colocar las otras líneas de marcas locales, explicó Mejía.

La Cooperativa de ferreteros,  presidida por  Luis de los Santos, y ASODEFE, coordinan la importación. Tanto Mejía como de los Santos, pidieron  al titular de Industria y Comercio, licenciado Melanio Paredes, que les garantice que la Dirección General de Normas (DIGENOR), les provea de la certificación de calidad.