Con la intención de conquistar el voto de los santiagueros en as elecciones del próximo 16 de febrero, el candidato a alcalde por el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Rafael-Papito-Cruz, ha diseñado un plan de gobierno municipal que descansa en cinco ejes, entre los que se destacan la sostenibilidad ambiental y la gobernabilidad y la transparencia.
Los otros tres ejes son los siguientes: el uso de suelo y ordenamiento territorial; población y cultura; y economía y competitividad.
“Nuestra visión cosiste en hacer de Santiago un municipio moderno, plural y próspero. Que tenga al ayuntamiento como un eje transversal de servicio y gestión que coadyuve a la revalorización de su cultura y tradiciones, a la generación de riquezas y a la sostenibilidad ambiental en el marco de respeto y armonía de toda su gente”, explicó.
En una entrevista exclusiva concedida a reporteros de Hoy, el abogado y presidente municipal del PRSC dijo que sus aspiraciones para dirigir los destinos del cabildo de Santiago están encaminadas a garantizar la transparencia, la eficiencia y la vinculación directa con las comunidades.
Resaltó además que cree en una gestión municipal en la que se le brinde más oportunidades a los jóvenes y a las mujeres.
“Desde el ayuntamiento promoveremos el empleo, la dinámica económica de la ciudad, a través de la inversión, cumpliendo con lo que establece la Ley 176-07. Esta ley le dice al funcionario qué hacer con cada peso que le llega al ayuntamiento”.
Experiencia. Cruz, quien culmina su tercer período como regidor en el ayuntamiento, donde ha ocupado en tres ocasiones la presidencia del Concejo de Regidores, se ha caracterizado por realizar una función normativa y fiscalizadora.
Desde su curul ha impulsado reglamentos, resoluciones y ordenanzas, a través de las que manifiesta que se ha propuesto hacer la gestión municipal más transparente y apegada a los mandatos de la ley.
Presupuesto. Cruz entiende que el ayuntamiento necesita un presupuesto inteligente que, apegado en ley, empodere a los munícipes del proceso de toma de posiciones. Por ello, aseguró, será celoso con el Presupuesto Participativo.
Criticó que en los tres años de la actual gestión municipal se han aprobado RD$350 millones para los diferentes barrios de Santiago pero han ejecutado menos de un 20%.
El candidato también cree en una gestión donde se eduque al ciudadano acerca de mantener la ciudad limpia, en vez de invertir cerca de RD$35 millones mensuales en jornadas diarias para esos fines.
Además, apuesta por una alianza con los sindicatos y rutas para aprobar una propuesta que promueve el transporte público colectivo de 60 pasajeros para descongestionar el caótico tránsito en las principales calles y avenidas.
“Aquí hay un gran problema con la movilidad urbana porque el tránsito crece de manera desorganizada. Se requiere rediseñar las vías del municipio, con la mano amiga del gobierno central para construir elevados y túneles porque el cabildo no tiene capacidad de resolver”.
Lamentó que no exista un plan rector que combine los presupuestos que han fragmentado el territorio de Santiago para crear una política entre todos para que la provincia crezca ordenada.
Abogó por Santiago como destino turístico y lamentó que la ciudad no se ha explotado como marca, no se le ha dado la importancia que merece y no se ha internacionalizado.