BAGDAD (AFP).- Diecinueve personas murieron ayer en distintos ataques en Irak, sumándose a los más de 5.700 civiles y miembros de las fuerzas del orden que perdieron la vida en actos de violencia en 2005.
Un total de 5.713 iraquíes, entre ellos 4.020 civiles y 1.693 miembros de las fuerzas de seguridad, murieron en el país en actos de violencia en 2005, según las estadísticas oficiales obtenidas el lunes por la AFP, las primeras de este tipo desde la invasión del país en marzo de 2003.
Esta cifra significa un promedio de más de 15 iraquíes asesinados cada día en centenares de ataques con coches bomba, atentados suicidas y otros asaltos armados, según estas cifras compiladas por los ministerios de Defensa, Interior y Salud.
El número de heridos alcanzó 8.378, entre ellos 6.065 civiles. Esta estadística no concierne a los rebeldes, que registraron 1.702 muertos, mientras que las fuerzas del orden procedieron a 9.264 detenciones entre sus filas.
La jornada del lunes se inscribe en la continuidad de estas estadísticas, con 19 iraquíes, entre ellos seis civiles, muertos en diferentes ataques. El último se produjo en Tikrit, norte, donde la explosión de un coche bomba mató a un policía.
El más mortífero de ellos fue un atentado suicida que dejó siete reclutas de la policía muertos al norte de Bagdad, según un balance proporcionado por fuentes de seguridad.