Gaza (EFE).- La artillería y la aviación israelí mataron ayer a seis palestinos en el norte de Gaza, entre ellos una niña de cinco años, e hirieron a otros siete, informaron fuentes hospitalarias.

Tras el incidente que causó ayer en  mañana tres muertos en el campo de refugiados de Yebalia, otro proyectil disparado con un carro de combate causó, según testigos, la muerte de una pareja e hirió a dos de sus hijos adolescentes en Beit Lahia, también en el norte de Gaza.

Fuentes militares israelíes confirmaron el primer ataque y afirmaron que se habían atacado edificios que “servían de refugio a terroristas” y desde los que habían sido disparados varios cohetes artesanales tipo “Kasam” contra territorio de Israel.

El ejército informó de que en los últimos días había lanzado octavillas en la zona de Yebalia para advertir a la población de que abandonase el lugar, dado que desde allí se disparan cohetes y podrían ser víctimas de la respuesta israelí.

La niña de cinco años, Khetam Taieh, vivía en ese complejo de viviendas, y murió horas después de resultar gravemente herida cuando un misil israelí estalló enfrente de los apartamentos.

Otras tres personas murieron en el mismo barrio de Al Nada bajo una lluvia de proyectiles de 155 milímetros, y otras dos resultaron heridas.

En total 400 familias tuvieron que abandonar el barrio por los disparos de la artillería israelí.

El Ejército de Israel había avisado previamente a los vecinos de que abandonaran las casas que iban a bombardear, al señalar que los milicianos que lanzan cohetes contra Israel se esconden detrás de los edificios, relativamente altos, antes de disparar.

Docenas de familias abandonaron las casa después del aviso con todos los efectos personales que podían.

“El Ejército israelí nos ha avisado más de una vez de que nuestras casas serían bombardeadas con el pretexto de que desde cerca de aquí se disparan cohetes”, dijo uno de los vecinos mientras se metía en su coche y se disponía a buscar un lugar donde quedarse.