Aunque ya los enfermos haitianos no están en el primer plano de los medios, los voluntarios que hacen labor humanitaria, médica y de asistencia continúan atendiendo en los refugios  a los sobrevivientes del terremoto.

Las mujeres y niñas que han sido dadas de alta del hospital Darío Contreras están ahora en tres refugios atendidos por religiosas y voluntarios de la Iglesia Católica.

“Al ver tanto sufrimiento en estos haitianos, creo que me he humanizado más”, dijo un fornido hombre, empleado del ex jugador de grandes ligas Neifi Pérez.

En el hogar auspiciado por su hermano, el cantante Rubí Pérez, todavía permanecen  ocho haitianos,  y allí va todavía la gente a llevar todo tipo de ayuda. Los haitianos que han sido dados de alta son llevados a su país por un equipo que trabaja para el artista y el pelotero. Los haitianos regresan a su patria  con ropa, alimentos y medicamentos.

Alrededor de 50 niñas y mujeres haitianas permanecen en los tres refugios ubicados en el municipio Santo Domingo Este.

Necesidades.  En el que está ubicado en Las Américas, los  mayores requerimientos son medicamentos, dinero y material gastable.

“Aquí, las mayoría de mujeres tiene necesidad de cirugías reconstructivas y son examinadas  por el doctor Guaroa Ubiñas, médico del hospital Darío Contreras”, dijo una religiosa que curaba las heridas a una adolescente.

La vida sigue.   En los albergues de mujeres la vida sigue al atenuarse el impacto de la tragedia. Ellas lubrican con  crema sus  manos, otras revisan sus uñas y las demás tejen en  trenzas sus cabellos. En sus camas y mesitas de noche, las mujeres que ahora son discapacitadas parciales, también juegan a las cartas, una válvula de escape.

Las personas que se restablecen en los refugios ya no están aisladas pues  han reanudado el contacto con sus familiares. Se les ve sonreír cuando conversan con  alguien.

Zoom

La sonrisa

La sonrisa ha vuelto a los rostros de los ciudadanos haitianos que reciben atención en los hospitales de Santo Domingo, Azua, Santiago, Jimaní, Neiba y Barahona.

Ubicación

Los hogares o refugios están ubicados  en el Ensanche Isabelita, Villa Carmen, en la avenida Mella  y Alma Rosa.

Las necesidades.

Las personas siguen donando, pero las necesidades de la población haitiana que permanece en los refugios son  cada vez mayores. Algunos se entristecen  cuando llega la hora de irse, pero otros ansían la llegada del momento de retornar a su patria.

La realidad

En Haití, pero sobre todo en su capital, Puerto Príncipe, es un lugar donde la intemperie es todavía el refugio de los   sobrevivieron del terremoto.