POR ALTAGRACIA ORTIZ GÓMEZ
Un teniente coronel policial, un capitán del Ejército y dos civiles, entre ellos una mujer, fueron detenidos el sábado en una operación en que las autoridades incautaron un cargamento de 1,387.28 kilos de cocaína valuado en RD$900 millones, dijo el vicealmirante Iván Alejandro Peña Castillo, director Nacional de Control de Drogas (DNCD).

El cargamento de 1,200 paquetes fue señalado por Peña Castillo como el más grande en términos económicos localizado hasta ahora.

Agregó el oficial de la Marina de Guerra que en la operación actuaron de conjunto la DNCD y la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA).

El oficial policial detenido es el teniente coronel, Lidio Arturo Terrero Nin, de 46 años, y el oficial militar involucrado es el capitán Quirino Ernesto Paulino Castillo, de 44 años. Los dos civiles detenidos son el chofer Tirso Cuevas Nin, y Belkis Elizabeth Ubrí Medano, de 42 años.

La DNCD señaló al capitán Paulino Castillo como el cabecilla del grupo que introducía la droga y a quien venían persiguiendo desde hacía casi un año.

El decomiso de cocaína se hizo el pasado sábado a las 2:00 de la tarde en la autopista Duarte cerca del cruce de la carretera que va a Los Alcarrizos.

EL ARRESTO

En una nota distribuida por la DNCD se indicó que la droga era transportada en el camión marca Daihatsu plata número L165796 que conducía Cuevas Nin. La droga iba en 47 cajas. Se explicó que en 45 de las cajas iban 25 paquetes con la droga, mientras que había otra con 37 y otra con 38.

Posteriormente se hizo otra operación también a cargo de la División Táctica de Investigaciones Sensitivas (DITIS) para detener al capitán del Ejército, Paulino Castillo, y la mujer Ubrí Medrano, cuando transitaban en un automóvil Mercedes Benz, blanco, placa XX-3547 por la avenida 27 de Febrero en las inmediaciones de la esquina con la avenida Núñez de Cáceres.

Quirino Ernesto Castillo posee bienes y propiedades en todo el país, que también serán incautados, dijo el vicealmirante Peña Castillo.

Las autoridades indicaron que tienen información de que el cargamento era manejado por una red internacional con incidencia en varios puntos del país.

Se trata del segundo más importante cargamento de cocaína durante los años de existencia de la DNCD, precisó Peña Castillo, y el decomiso más importante en términos económicos.

«El cabecilla de este alijo, Quirino Ernesto Castillo, era seguido de cerca, desde hace más de un año», dijo el alto oficial de la Marina de Guerra.

Definió el decomiso como un golpe importante contra las redes organizadas de narcotraficantes.

«Estamos centralizando la investigación en los que mueven el negocio y los capitales», sostuvo.

En la conferencia de prensa para presentar el cargamento de cocaína también estuvo el fiscal, José Hernández Peguero, para vigilar que se cumplan los requerimientos del Código Procesal Penal.

PROCEDENCIA

En cargamento de drogas penetró al país, al parecer, por la región del Sur y era trasladado al Cibao, donde sería llevado a una zona franca para prepararlo y de allí llevarlo a los Estados Unidos, dijo Peña Castillo.

Nin Terrero, al momento de su arresto, se desempeña como comandante de la cárcel de Azua, reveló una fuente policial al periódico HOY.

Fue inicialmente llevado detenido al comando de Operaciones Especiales de la Policía en Manoguayabo donde Nin Terrero fue entregado a los agentes de la DNCD.

El capitán Quirino Paulino Castillo, del Ejército, se desempeñaba como ayudante de un alto oficial en la administración gubernamental pasada.

Las fuentes dijeron a HOY que Paulino Castillo posee una finca en San Juan de la Maguana en la que para arrear el ganado utiliza helicóptero. Una fuente dijo anoche que ambos oficiales fueron destituidos.

EN LOS BARRIOS

El vicealmirante Peña Castillo dijo que su papel no sólo es incautar drogas, sino que ellos también trabajan día y noche para evitar la venta de estupefacientes en los barrios.

«Tenemos nuestros miembros como verdaderos centinelas, arriesgando su vida para combatir ese delito, pero hay que saber que al país se le hizo un gran daño, pues los narcotraficantes en vez de pagar con dinero pagan con drogas», señaló el director del DNCD.

Sostuvo que no sabe hasta dónde van a llegar los narcotraficantes en el uso de los seres humanos, ya que en los últimos días existe el reporte de tres mujeres embarazadas utilizadas como «mulas» en el trasiego de drogas.