Atraviesan buen momento
Los Angeles Lakers, Kobe y Phil Jackson

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Por J.A. ANDADE
De ESPN.Com
LOS ANGELES.-
A este ritmo no pasará mucho tiempo antes que los Lakers tengan una rivalidad con los Phoenix Suns. Aún no podemos decir eso, al menos no lo podemos hacer si adherimos a las regulaciones una vez establecidas por Kobe Bryant.

Tras que los Lakers vencieran a los Sacramento Kings en las finales de la Conferencia Oeste en el 2002, le pregunté a Bryant si los Kings eran los rivales más importantes de los Lakers.

 Dijo que no podía usar esa palabra. «Primero tienen que vencernos en los playoffs», dijo Bryant. «Vamos, ya saben las reglas».

Entonces quizás la victoria de los Lakers de 122-115 contra los Suns en Staples Center no haya cambiado la terminología, y quizás el entrenador de los Suns Mike D’Antoni haya podido decir «Esto no me molesta», viendo como se daban las cosas en la temporada regular.

Pero tras que los Suns rebotaran a los Lakers de los playoffs las últimas temporadas, los Lakers finalmente parecen estar listos para tomar una serie de mejor de siete partidos por primera vez desde que Steve Nash llegó a Phoenix.

Esa es una revelación de este partido.

 La otra es que Phil Jackson se ve increíblemente bobo vestido de pajarita roja.

 Esperemos que pronto la guarde en un cajón.

Pero a quien probablemente volvamos a ver en tiempo de playoffs es a Andrew Bynum. Si va a marcar números como estos un alto de carrera de 28 puntos, 12 rebotes, cuatro asistencias y dos tiros bloqueados–le da a los Lakers el arma perfecta para atacar la debilidad de tamaño de los Suns. «Es un tema», dijo el alero de los Suns Shawn Marion. «Tienen un legítimo muchacho de tamaño».

Phil Jackson y Bryant hicieron lo mejor que pudieron para desmentir. Recuerdan como los Lakers cayeron a un record de 42-40 tras haber estado 13 partidos por sobre .500 en algún punto la temporada pasada, y no han olvidado el decaimiento de Bynum tras un prometedor comienzo el año pasado.

«Sólo queremos mantener nuestra imagen», dijo Jackson. «Mostrar consistencia en cada partido. A fin de año, si Bynum es MVP entonces diremos que ha tenido un gran año».

Con Bynum en la cancha delantera junto con Lamar Odom, los Lakers forzaron a los Suns a utilizar una gran alineación integrada por Amare Stoudemire, Brian Skinner, Boris Diaw y Marion durante el último cuarto. Eso mantuvo a uno de los mejores lanzadores de tiros de tres puntos de los Suns, Raja Bell, en el banco.

El otro aspecto que cambió de los partidos de los Lakers-Suns en el pasado es el dominio de Phoenix en la posición de armador. Para parafrasear a Rose Royce, Smush ya no vive aquí. Claro está, Nash es aprobado en el cuadro de enfrentamientos, pero con el regreso de Derek Fisher y la mejoría de Jordan Farmar, la diferencia no es tan pronunciada como solía ser. El año pasado, Nash venció a Parker por un promedio de 22 a nueve. En dos partidos este año–ambas victorias de los Lakers–Fisher bajó la diferencia a una marca de 22-17.

Bynum también expuso las lentas rotaciones defensivas de Stoudemire. Y Bynum y Fisher anulan la llegada de Grant Hill especialmente tras que la nueva adquisición de Trevor Ariza ayudara a mantener a Hill a tan sólo dos puntos de segunda mitad. (Que hay de Ariza, aprovechando al máximo su primera apertura de los Lakers y 33 minutos para obtener 14 puntos, siete rebotes y el destacado de la noche: lanzar una volcada sobre Hill como lo hizo Kobe contra Nash hace unos años).

El atletismo de Ariza, la altura de Bynum, la presencia veterana de Fisher…¿Qué estamos dejando afuera? Oh claro, Kobe. Fue la estrella superior hacia el final, venciendo a Nash y tomando el control el último cuarto cuando anotó 12 de sus 38 puntos.

«Tenemos un cuerpo sólido de jugadores. Realmente lo tenemos. Tenemos distancia, velocidad, profundidad. Tenemos muchachos que pueden robar la pelota. Tenemos armadores de jugadas. Todo se ve muy sólido».

Se ve como un equipo que puede competir con los Suns, de quienes están detrás por un partido en la División del Pacífico y no deberían tener si se enfrentan en la postemporada. D’Antoni no se mostró asustado. «Creo que estamos bien», dijo. «La última vez que revisé estábamos a uno o dos partidos de la ventaja en el Oeste». Noten eso, a diferencia del intercambio analítico hacia fines de su último encuentro, no habló acerca de vencer a los Lakers en los playoffs.

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