LONDRES (EFE).- El obispo de Chester intervino personalmente para impedir que Camilla Parker, compañera sentimental del príncipe Carlos, le acompañara a la “boda del año” del Reino Unido, revela la prensa inglesa.

Según el dominical Sunday Express, el obispo Peter Foster, dijo a las familias de los novios que sería “totalmente inapropiado” que los hombres de Iglesia saludasen al príncipe Carlos a su entrada en la catedral de Chester “con su amante del brazo”.

La revelación la hicieron miembros de la familia del novio, Edward van Cutsem, que se casó el sábado con la hija de los duques de Westminster, Tamara Grosvenor.

El prelado lanzó lo que el periódico califica de “ultimátum” durante el ensayo para la boda en la catedral en presencia de los duques y miembros de la familia van Cutsem.

En un intento de resolver la situación, se decidió en último momento que la Familia Real sea recibida en una de las puertas de la catedral por el Obispo y otros miembros del clero, incluido un sacerdote católico.

El resto de los invitados, incluida Camilla, entrarían por otra puerta del templo. Finalmente, sin embargo, ni Carlos ni Camilla fueron a la boda. El Príncipe pasó el día con soldados del regimiento Black Watch, cuyos miembros están actualmente destacados en Irak.

Sí asistieron en cambio Isabel II y su esposo, el duque de Edimburgo, además de sus nietos, los príncipes Guillermo y Enrique.

Según el periódico, la actitud del Obispo enfrenta al príncipe Carlos con la Iglesia de Inglaterra, de la que su madre, Isabel II, es cabeza.

El “Sunday Express” agrega que Carlos está sometido también a presiones de la propia Camilla y de los amigos de ésta para que se case finalmente con la mujer a la que ama.