POR MANUEL JIMENEZ
SANCHEZ.– El elevado nivel pluviométrico y la ausencia de un sistema de drenaje y canalización de las aguas, son las causas de los hundimientos y deslizamientos que han colapsado y agrietado la estructura de, al menos, 100 viviendas en este municipio, determinó un estudio de la Academia de Ciencias de la República Dominicana.

No obstante, el estudio indica que se trata de un problema que se concentra en lugares muy puntuales de esta comunidad y que tiene una solución técnica de bajo costo.

Recomienda la reubicación de las familias de las zonas afectadas y descarta que exista algún riesgo de hundimiento del pueblo como se llegó a prevenir a través de medios de prensa.

Un resumen ejecutivo del estudio fue presentado por el ingeniero geólogo Rafael Osiris de León, quien junto al presidente de la Academia de Ciencias, Nelson Moreno Ceballos, acompañó ayer al presidente Leonel Fernández en un recorrido por las áreas afectadas.

La investigación científica se realizó a solicitud de la Presidencia de la República, al margen de otros estudios realizados por las secretarías, de Obras Públicas y de Medio Ambiente, así como de una firma privada y todos son coincidentes en torno al origen de la falla y en las recomendaciones que formulan, dijo Fernández.

Se destacó que el problema se presenta desde hace varios años y que se concentra en un tramo de la avenida Independencia, cerca del cementerio municipal, donde colapsaron dos viviendas, así como en los barrios La Navaja, la Torre, Altamira y Los Jhonson, donde se calculan unas 100 viviendas afectadas, dijo el ingeniero De León.

Explicó que desde hace décadas, los suelos arcillosos y de naturaleza calcárea en este municipio, han sido afectados por la alta pluviometría de la zona, que en algunos casos supera los 200 milímetros por año, saturándolos por completo, incrementando su peso y las presiones de los poros y reduciendo su resistencia.

De León dio a conocer detalles del estudio a la prensa en presencia del presidente Fernández y de varios de sus funcionarios frente a dos de las viviendas colapsadas a causa del problema en un tramo de la avenida Independencia, de aquí.

Una de las causas del fenómeno es que al norte de las viviendas colapsadas cruza el arroyo Gri Gri, que en los períodos lluviosos incrementa sus caudales y su poder erosivo, quitando el soporte del talud que va hacia el norte de las casas.

Un segundo factor, agregó De León, es que todo el subsuelo de esa área está constituido fundamentalmente por una arcilla calcárea de color amarillento, que se agrieta por efecto de la radiación solar y permite la entrada de agua en superficie.

Pero debido a que la arcilla es impermeable, el agua no puede salir, dijo el técnico, tras lo cual añadió que, entonces, cada vez que un metro cúbico de agua entra al suelo, este aumenta su peso en una tonelada métrica.

De León explicó que en adición a este fenómeno se genera una presión de poros que empuja el talud especialmente hacia su cara libre.

Un tercer factor, continuó el profesional, es que a orilla de la avenida cruza una tubería de cuatro pulgadas de PVC que se rompió y aportó grandes caudales de agua.

Añadió que, entonces se sumaron el agua de las lluvias, de la tubería y la erosión producida por el arroyo Gri Gri, provocando el deslizamiento que colapsó las dos viviendas.

SUGERENCIAS

La Academia de Ciencias sugirió un conjunto de acciones técnicas de bajo costo que pueden ser implementadas, incluso, por el ayuntamiento, dijo De León.

Entre las recomendaciones figura la construcción de tres trincheras o zanjas perpendiculares a la avenida y que vayan en la misma dirección del arroyo Gri Gri.

Explicó que las zanjas deben tener aproximadamente dos metros de profundidad y un metro de ancho, rellenándose de grava y tapándose.

Esta solución permitiría que el agua que está dentro del suelo salga, vaya hacia el arroyo y le quite la presión de poro (peso al suelo), lo que aumentará la resistencia y estabilidad del suelo, expresó De León.

Sin embargo, dijo que las viviendas colapsadas deben ser removidas y que la Secretaría de Obras Públicas debe volver a nivelar el terreno y reconstruir el tramo de la calle que se ha deslizado.

De León manifestó que en los demás sectores afectados el origen del problema es diferente, aunque siempre con un efecto determinante de erosión del suelo y la falta de un sistema de drenaje y canalización de las aguas.