Una gran confusión se produjo al concluir la octava audiencia del caso Paya, cuando cuatro de los 25 implicados en el expediente fueron llevados a lugares desconocidos por miembros de la Policía Nacional que participaban en el operativo de seguridad.

A su salida del Palacio de Justicia de San Cristóbal, el imputado Mayobanex Montero vociferó, mientras lo conducían al vehículo,  que lo querían asesinar, al tiempo que los familiares gritaban y reclamaban que se dijera el lugar a dónde lo iban  a llevar.

Al igual que él, también fueron trasladados José Luis Montás Vargas, Luis Lara y Ricardo Rafael Guzmán.

En torno  a la situación han circulado versiones como que están siendo interrogados por los incidentes ocurridos el pasado viernes 18, y la otra que apunta a que están siendo pedidos en extradición por las autoridades norteamericanas.

Oficiales policiales dijeron que habían sido llevados a la Dirección de Prisiones, pero se confirmó que allí no se encuentran.