Si hay un riesgo social, que las familias vivan lejos y falta de recursos económicos, los médicos prefieren dejar ingresados a los pequeños con dengue, aseguran las médicas

El dengue estresa el desarrollo de las emergencias y salas de ingreso de los hospitales que han tenido la mayor avalancha de pacientes con la enfermedad viral endémica.

Las directoras de los dos hospitales pediátricos que mayor cantidad de pacientes con dengue reciben los centros expresaron.

Las doctoras Dhamelisse Then Vanderhorst y Mabel Jons, directoras de los hospitales Hugo Mendoza y Robert Reid Cabral afirman que el promedio de casos ronda entre los 90 y 110. Hasta 1,275 pacientes con probable dengue han atendidos los médicos del Hugo Mendoza. Ese centro ha tenido que reforzar la emergencia con personal especializado. “Cuando se llena el hospital arriba en la planta, dejamos niños ingresados en la emergencia y eso complica el desarrollo”, dijo Then. El dengue ha hecho que los hospitales trabajen en forma diversa y no pueden negar que la gran cantidad de trabajo que se les ha generado compromete la calidad del servicio que se brinda.

Ambas profesionales aseguran que el dengue como enfermedad dinámica ha hecho que tengan que añadir cada vez más camas.

El Robert Reid dispuso inicialmente 50 camas para dengue, luego la tuvieron que elevar a 70 y ya tienen 90. Han tenido que habilitar camas, eso implica más médicos y más enfermeras. En el Hugo Mendoza se abrieron 100 camas para dengue y tienen una unidad de cuidados intermedios para evitar el paso a cuidados intensivos. Ahí se estabilizan, asegura Then.

Ocupación de camas

El 80% de los pacientes tienen una estadía de menos de 72 horas en los hospitales Hugo Mendoza y Robert Reid Cabral. El 100% dura menos de siete días, lo atribuyen al manejo oportuno que tienen de la atención a cada paciente.

El ingreso es alto

Varios factores inciden en el alto número de ingresos de pacientes con dengue, la población está más educada y lleva sus niños más rápido a los centros. Asimismo, los medios de comunicación informan y la población está más educada, aseguran las dos médicas. Los padres reaccionan a la fiebre.