En sus primeros dos años el gobierno de Luis Abinader ha logrado aumentar considerablemente las recaudaciones, limitar el gasto y reducir el déficit fiscal, pese a un entorno internacional adverso como consecuencia de la pandemia del covid-19 y la invasión rusa a Ucrania a partir de febrero de este año.

En el primer semestre de este año, los ingresos de las oficinas recaudadoras alcanzaron RD$470,754.8 millones, representando un crecimiento de un 17.1% en relación a igual periodo del 2021, producto de RD$335,482.5 millones de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) y RD$111,017.4 millones de la Dirección General de Aduanas (DGA).

Este último monto representó un incremento del 36.7% en relación con el mismo período del año pasado.

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La DGII recaudó RD$607,623.8 millones en 2021, para un aumento de un 25 % en relación a lo estimado, mientras que a través de la DGA se percibieron RD$191,979 millones, para un aumento de 39 % en relación a la meta original. En ese año la DGII registró un proceso de amnistía fiscal a través de la Ley 46-20 de Revalorización y Transparencia Patrimonial por el cual se recaudaron RD$35,269.4 millones.

El aumento de las recaudaciones en el actual gobierno se ha producido sin una reforma fiscal como establece la Estrategia Nacional de Desarrollo, debido a las medidas administradas y la recuperación económica.

El déficit fiscal contemplado en el presupuesto de este año es de RD$174,794 millones, equivalente a un 3% del producto interno bruto (PIB). Desde el 1 de enero al 4 de agosto de este año, el gobierno registró un déficit fiscal de RD$33,848 millones, fruto fr ingresos por RD$554,347 millones y gastos por RD$588,796 millones.

En el 2020 tuvo un déficit fiscal RD$336 mil millones y en el 2021 bajó a RD$159 mil millones, debido al crecimiento de la economía, estimulado por las medidas adoptadas por el gobierno.

Para el año pasado se redujo el déficit en un 53% en valor y como porcentaje del PIB se cayó de -7.5% que se tuvo en 2019 a una cifra de -2.9% en el 2021, por debajo de lo previsto y alineado con el proceso de consolidación fiscal. Eso ocurrió pese a las presiones presupuestarias.

“El gobierno ha hecho un buen manejo presupuestario, no ha crecido el déficit, a pesar de la situación de pandemia del covid-19”, sostiene el economista Rafael Espinal.

Consideró que el gobierno ha logrado hacer ahorros que le han permitido cerrar con un déficit no mucho mayor del programado para este año.