El pasado sábado en el marco de la Semana de Concienciación sobre el Autismo, se celebró un taller inclusivo de pintura que reunió a cientos de familias en una tarde cargada de emoción, creatividad y valores que construyen un mundo más justo.
La actividad fue dirigida por la reconocida artista plástica y maestra Alma Vázquez, quien durante años ha formado a niños y niñas en su ya emblemático Taller de Pintura Alma Vázquez. En esta ocasión, la consigna fue simple pero poderosa: pintar lo que el corazón desee. Y así fue como los lienzos se llenaron de mundos mágicos, colores intensos y mensajes que reflejaban la mirada única de cada niño y niña.
Lo verdaderamente hermoso del evento no solo fue ver a tantos niños crear, sino verlos compartir, socializar, y demostrar que la inclusión se aprende desde casa. Padres y madres, sin importar si sus hijos viven o no con la condición del espectro autista, mostraron con hechos el valor de la empatía, la tolerancia y el respeto por las diferencias.
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Uno de los momentos más conmovedores fue cuando Fernando Gabriel, el hijo de mi hermano Fernando, pintó en vivo. Su entusiasmo contagió a muchos de los pequeños presentes, quienes se unieron espontáneamente a su expresión artística. La escena fue simplemente inolvidable.
Las palabras de agradecimiento por parte de las familias no se hicieron esperar. Muchos padres expresaron su deseo de que actividades como esta se sigan repitiendo, resaltando el enfoque humano y social que tanto bien hace a la comunidad.
La jornada fue parte de una serie de eventos organizados por La Mesa del Di, en lo que ya es la segunda edición de esta semana dedicada a crear conciencia sobre el autismo. El día anterior, el viernes, tres especialistas ofrecieron conferencias fundamentales sobre el diagnóstico temprano, la crianza autónoma de niños con la condición, y el desarrollo de sus talentos a través de múltiples disciplinas.
El arte, la palabra y la empatía se unieron este fin de semana para recordarnos que un mundo inclusivo no solo es posible, sino urgente y necesario.
Las imágenes del evento hablan por sí solas, a continuación algunas de ellas:











