Kandahar. Afganistán. AP. Un autobús chocó hoy con los restos de un camión cisterna que había sido atacado por insurgentes talibanes en el sur de Afganistán, percance que dejó 45 muertos, dijeron las autoridades.   

El esqueleto del camión fue abandonado desde hace varios días por los insurgentes en medio de una carretera estrecha cerca de la frontera entre las provincias de Kandahar y Helmand.

La policía considera el área muy peligrosa como para entrar, agregaron los funcionarios.  

Poco antes del amanecer el autobús embistió el camión y quedó envuelto en llamas, precisó Abdul Razaq, jefe de policía provincial de Kandahar.  

Policías, soldados y ambulancias se dirigieron al lugar del accidente en un área desolada.

Muchas de las víctimas quedaron carbonizadas más allá de toda posibilidad de reconocimiento y será difícil establecer su identidad, dijo Razaq.   

Un sobreviviente, Mohamed Habib, lloraba mientras buscaba a su hermano.   

“No me importan mis pertenencias ni mi dinero que se quemaron en el autobús, pero por favor ayúdenme a encontrar a mi hermano, vivo o muerto”, declaró a AP Televisión News. “¿Cómo voy a presentarme ante mi madre sin él?”.  

La cifra de víctimas es de 45 muertos y diez heridos, dijo Javid Faisal, vocero del gobernador de la provincia de Kandahar.

Habló con The Associated Press en el Hospital Mirwais en la ciudad de Kandahar donde fueron conducidos muchos de los heridos.  

El autobús había comenzado su viaje en la capital de la provincia de Helmand y debía parar en la ciudad de Kandahar para seguir al norte hacia la capital Kabul, dijo Razaq.   

Los accidentes de tránsito son comunes en Afganistán, donde las reglas del tránsito suelen ser ignoradas por una mezcla caótica de automóviles, camiones, bicicletas, peatones y animales.

Los caminos fuera de la capital tienen poco mantenimiento y los viajeros están sujetos a la posibilidad de robos y bombas en los caminos.   

En septiembre, un autobús y un camión chocaron y se incendiaron en una carretera en la provincia oriental de Ghazni. Murieron 51 personas.   

Asimismo hoy, la coalición militar encabezada por Estados Unidos dijo que las fuerzas afganas y extranjeras arrestaron a unos diez insurgentes en los dos últimos días en cuatro provincias, incluso varios combatientes del Talibán en Kandahar.