MONTE PLATA. La carretera Juan Pablo Segundo, denominada también autopista del Nordeste,  que comunica a varios pueblos del Cibao con la capital, se ha convertido en un serio peligro para quienes se desplazan hacia Samaná, cruzando por esta provincia.

Desde que fue inaugurada en esta vía se han producido varios aparatosos accidentes de tránsito, en los  que  han perecido una cantidad significativa de personas.

El hecho más reciente ocurrió el pasado domingo cuando un minibús que se dirigía a Samaná se deslizó después de ponchársele uno de los neumáticos.

Esta  vía se ha tornado  tan peligrosa, que incluso algunas personas  tienen  temor de viajar hacia la región del Cibao utilizando esta ruta, y han decidido hacerlo por  la carretera Duarte, debido a la poca seguridad que presenta esta vía.

Se ha advertido que cuando está lloviendo esta carretera es mucho más peligrosa, y con frecuencia algunos vehículos sufren deslizamientos cuando se desplazan a alta velocidad.

La vía es utilizada por  viajeros que tratan de acortar distancia para trasladarse a Samaná, una zona muy turística, u otros pueblos de la región.

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Citan problemas

Se ha denunciado que la carretera carece de iluminación, parachoques y otros elementos de seguridad. También, la gran cantidad de vacas y caballos que atraviesan la vía, que   constituyen un constante peligro de accidentes.