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Ambiórix Germosén Díaz no era una persona violenta y amaba mucho a su hijo, según narró su vecino Víctor José Domínguez, quien atribuyó el hecho a los problemas que este venía arrastrando en su vida.
SANTIAGO.- Mirna Durán, madre del niño José Germosén Durán, de cinco años, al que su padre, José Germosén Díaz, lanzó ayer del puente Duarte de la capital y luego se suicidó al tirarse del mismo lugar, afirmó que la tragedia pudo haberse evitado si la Policía hubiese actuado desde que denunció que su esposo había secuestrado al niño.
Había denunciado a la Policía que mi hijo estaba desaparecido hacía cuatro días y nadie hizo nada, expresó.
Durán acusó de complicidad a los familiares de su ex pareja, ya que conocían de su paradero, pero se negaron a darle la dirección.
Según las versiones de familiares y relacionados, José Ambiórix Germosén Díaz, desapareció con el niño hacía unos cuatro días cuando ambos salieron a retirar un dinero en una agencia que la abuela del niño enviaba desde Puerto Rico.
Dijeron que a pesar de que la madre había fijado una pensión alimenticia para el niño, ambos mantenían buenas relaciones e incluso el filicida la visitaba constantemente.
Los restos del niño son velados en la funeraria Savica y serán sepultados hoy a las 9:00 de la mañana en el cementerio de El Ingenio.
Los de José Ambiórix Germosén Díaz, de 36 años, eran velados en la funeraria Blandino. Al hombre se le encontraron letras de boleros y citas biblícas y un papel con principios sobre el matrimonio.
Familiares guardan silencio
El cadáver del niño fue reclamado en Patología Forense por René Quezada, esposo de una prima de la madre. Mientras el cadáver de Germosén Díaz por Napoleón Peña y un sobrino.
El menor era el único hijo de la pareja. La mujer tenía otra hija.
Germosén Díaz no era una persona violenta y amaba mucho a su hijo, según narró su vecino Víctor José Domínguez, el cual atribuyó el hecho a los problemas que el hombre venía arrastrando en su vida.
Informó que hacía casi dos años que había perdido su trabajo en la zona franca y recientemente enfrentaba problemas sentimentales con su esposa.
Germosén Díaz había entrado al seminario católico Santa Rosa de Lima, que dirige el padre Nino Ramos en el sector de Gurabo, Santiago, porque pretendía ser sacerdote, algo que abandonó luego por razones desconocidas. Residía en la comunidad de La Búcara, en Jacagua, donde vivió su niñez y parte de la adolescencia. Mirna Durán vive en un residencial en la carretera Don Pedro. Es secretaria ejecutiva de profesión y sus amigos, parientes y amigos la califican como una persona responsable y querida por todos.
