El ex presidente llegó a Miami el lunes por la tarde, al igual que muchos de sus seguidores. Donald Trump, inculpado a nivel federal por poner en riesgo la seguridad nacional al mantener bajo su custodia documentos ultrasecretos sobre asuntos nucleares y de defensa tras dejar la Casa Blanca, tiene que comparecer hoy ante un tribunal de Miami, y las autoridades están en alerta máxima, ya que la retórica cada vez más violenta del bando de Trump hace temer nuevos estallidos.

Algunos republicanos electos están comparando la acusación de Donald Trump con un acto de guerra. «Ojo por ojo», tuiteó el congresista por Arizona Andy Biggs, mientras que otros amenazaron con represalias: «La retribución está en camino», posteó Kimberley Guilfoye, la prometida del hijo mayor de Trump, Don Junior.

«Si quieren detener al presidente Trump, van a tener que pasar por mí y por 75 millones de estadounidenses», tronó Kari Lake ante una multitud en Georgia. «Y quiero decirles -añadió la excandidata a gobernadora en Arizona- que la mayoría de nosotros somos miembros de la NRA», es decir, «estamos armados».

Convocatorias a manifestaciones

Esta retórica cada vez más violenta recuerda a la escalada verbal de Trump en los días previos al ataque al Capitolio del 6 de enero de 2021, y preocupa a las autoridades de Florida. Una vez más, Trump y sus partidarios están retransmitiendo llamamientos a manifestarse ante el tribunal federal de Miami donde el expresidente debe comparecer este martes.

«Tomen sus banderas, sus gorras, sus camisetas de Trump, sus megáfonos y su amor por el presidente Trump», reza uno de los llamamientos a manifestarse pacíficamente. El lunes por la noche, la policía había comenzado a asegurar los alrededores del tribunal federal por si se producía algún estallido.

Sin embargo, algunos de los partidarios del expresidente son más pesimistas sobre el futuro político de Donald Trump. Su exsecretario de Justicia ha leído el escrito de acusación, de 49 páginas, y lo considera condenatorio. «Me sorprendió la sensibilidad y el número de estos documentos. Y los cargos contra él por violar la Ley de Espionaje al ocultar documentos clasificados son sólidos. Por supuesto, tendremos que esperar a ver qué dice la defensa y si todo está verificado, pero creo que incluso si sólo la mitad es verdad, está cocinado», dijo Bill Barr.

“Esta vez lo tienen. No veo cómo puede salir de esta. Pero sus verdaderos partidarios seguirán apoyándolo. Están ciegos”.

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