El turismo está amenazado por actividades delictivas tan diversas, que van de la delincuencia común a las epidemias y los fenómenos naturales.
Las autoridades lo saben, y por eso desarrollan un “Taller de capacitación en manejo de riesgos para destinos turísticos”, con la participación de expertos extranjeros.
El evento es tanto más importante cuanto que el huracán Irma representa una seria amenaza para el país, sobre todo para la región Este.
Ayer mismo, los ministros de Turismo y Obras Públicas, junto al director del Cestur, se reunieron con empresarios e inspeccionaron la región para activar un plan de contingencia, ante el posible paso del ciclón por el país.
Según Juan Carlos Torres Robiou, el Cestur dispone de 130 agentes en el Este, dispuestos a encarar las eventualidades.
“La seguridad es la variable de primer orden a la hora de elegir un destino. Aquí todos los años aumenta el turismo. Por eso, obviamente, estamos bien en turismo, pero hay que seguir mejorando”, observa.
Dos retos inmediatos identifica él: concertar una alianza público-privada y resguardar la temporada de cruceros en Puerto Plata.
La temporada de cruceros no ha reportado incidentes en los últimos años. Así lo resalta Torres Robiou.
En tanto, la Policía Nacional también está alerta para enfrentar cualquier incidente. Eso lo dice el director regional, general Manuel Rodríguez.
Este oficial se moviliza para coordinar acciones con los gobernadores y alcaldes de la zona, para impulsar el Plan de Emergencia y Mitigación de Desastres.
Aunque lleva pocos días en el cargo, Rodríguez ve desde ya los estragos que podría causar el fenómeno en zonas vulnerables.
“Aquí hay zonas que se inundan y donde hay deslizamientos de tierra. Queremos estar preparados y hacemos reuniones con todas las alcaldías”, apunta.
Si Rodríguez insiste en la vulnerabilidad de la región, también repara en la necesidad de proteger vidas humanas y propiedades.
De ahí las reuniones con hoteleros, comerciantes y periodistas.