Autoridades reforzarán con 1,000 militares frontera con Haití por salida Minustah

Autoridades reforzarán con 1,000 militares frontera con Haití por salida Minustah

La unidad está compuesta por unos 1.500 militares que se rotan de forma continua a lo largo de la frontera de 350 kilómetros/Foto: Fuente externa.

República Dominicana reforzará la seguridad militar en la frontera con Haití para evitar un eventual incremento en el tráfico de armas y drogas y el ingreso de inmigrantes luego del retiro de las fuerzas de paz de las Naciones Unidas de ese país.

Un grupo de 1.000 militares se encuentran en un programa de capacitación a fin de que puedan ser integrados en los próximos meses a la unidad de vigilancia fronteriza, anunció el ministro de las Fuerzas Armadas, Rubén Paulino.

La unidad está compuesta por unos 1.500 militares que se rotan de forma continua a lo largo de la frontera de 350 kilómetros. Durante las épocas en que se incrementa la inestabilidad política en Haití el Ministerio de Defensa dominicano aumenta la presencia militar en la frontera para contener eventuales olas migratorias clandestinas o el tráfico ilegal de armas o drogas.

Para formar parte de la unidad los militares reciben cursos de capacitación sobre derechos humanos, detección de contrabando y en algunos casos creole, una de las lenguas oficiales de Haití.

Paulino recordó que el 15 de octubre la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (Minustah) será desintegrada por decisión del Consejo de Seguridad de ese organismo internacional.

La Minustah, compuesta por unos 2.400 militares, concluirá sus labores tras 13 años de presencia en Haití. Fue creada en 2004 para controlar la inestabilidad tras el golpe de Estado contra el entonces presidente Jean Bertrand Aristide.

La fuerza de paz será sustituida por una unidad de 1.275 policías civiles que tendrá una vigencia inicial de seis meses. El incremento de la vigilancia fronteriza por parte de República Dominicana incluye la reciente creación, con ayuda de Estados Unidos, de una unidad canina destinada a detectar drogas, explosivos y ayudar a localizar migrantes.

La unidad de vigilancia fronteriza también comenzó a usar en 2016 dos drones para detectar migrantes sin permiso legal y empezó a instalar cámaras en la frontera.