Dodge es una de las marcas ‘pesos pesados’ en cuanto a autos potentes se refiere, y así nos lo acaba de corroborar con su último modelo: el Charger SRT Hellcat, una berlina que pasa a convertirse, por méritos propios, en la más potente y rápida del planeta.

Para lograr sus impresionantes prestaciones instala bajo el bonete un descomunal propulsor HEMI V8 de 6,2 litros sobrealimentado que desarrolla nada menos que 707 caballos y 880 Nm de torque motor.

Potencia que se transmiten a las ruedas traseras a través de una transmisión automática de 8 velocidades capaz de cambiar de relación en sólo 160 milisegundos, y con función Launch Control.

Gracias a ello, el Charger Hellcat es capaz de alcanzar los 328 km/h y únicamente necesita 11 segundos para completar el cuarto de milla (400 metros) o 13 segundos para llegar hasta los 170 kilómetros por hora.

Pero, para los que no quieren quemar rueda en cada semáforo, este modelo cuenta con dos llaves, una roja y otra negra, que se emplean separadamente dependiendo de lo radical que se quiera andar. Con la llave roja se tendrá toda la potencia a disposición, mientras que con la negra el motor no pasará de las 4.000 revoluciones, activándose un modo denominado ‘street’ que lo convierte en un auto más ‘domable’.

Para hacer honor a su motor se han sobredimensionado todas y cada una de las líneas del Charger convencional, añadiendo tomas de aire más grande para conseguir un mejor enfriamiento del motor.

Para el interior se podrá configurar a gusto el habitáculo gracias al amplio catálogo que posee, con diferentes tapicerías, materiales y colores.

Además de un dispositivo de sonido Harman Kardon de 900 vatios con 18 bocinas y pantalla táctil de 8,7 pulgadas que informa sobre el estado del auto, telemetría, potencia y entretenimiento de a bordo. Las ventas en el mercado norteamericano está prevista a partir de la primavera de 2015.

Papa Francisco dispara las ventas del auto que usó

Según KIA, las ventas del utilitario Soul se han disparado después de que el papa Francisco utilizara este modelo durante su recién visita a Corea del Sur.

El papa llegó a Seúl el día 14 de agosto, cuando se le vio por primera vez utilizar el Kia Soul, y estuvo en el país hasta el 18.

El número de pedidos del 14 al 20 de agosto en su mercado local, subió hasta una media de 32,5 unidades diarias, lo que supone un 62,5% más comparado con los registrados de meses anteriores. Los responsables de la marca reconocieron que las ventas mensuales de este modelo eran bastante «insignificantes» y que el cambio de tendencia tiene mucho que ver con la visita del papa.

Ahora la compañía espera que la demanda de este modelo también crezca en el exterior, donde se vendieron 139.048 unidades entre enero y julio de este año.

La elección por parte del papa al utilizar un Kia Soul de color azul y con motor de 1,6 litros sorprendió mucho en Corea del Sur, donde se esperaba que el pontífice utilizara un vehículo de alta gama en su traslados por el país.

Según reveló la organización de la visita papal, Francisco insistió en querer un auto pequeño de fabricación local para sus traslados, y rechazó otros vehículos más ostentosos.